-¿Escuchaste a Julia gritar?, como puede ser eso- le dije asustado.
La criatura empezó a chillar, un escalofrío me recorrió toda la espalda. Podía sentir, el dolor y la tristeza en ese grito.
Mis ojos se humedecieron.
-Esas cosas, están sufriendo…- me limpie la cara con la manga del saco.
La
bestia parecía afectada con nuestros ataques y ahora estaba enojada.
Mientras Ocelot caía a mis brazos después de golpear con la cascada, la
criatura empezó a levantar cientos de rocas del suelo que se volvieron
transparentes como gemas y empezaron a disparar decenas de lasers hacia
Ocelot.
-Ocelot!
Corri hasta el con todo lo que daban mis
piernas y lo atrape en aire dándole la espalda a los rayos de luz.
Golpeaban por todos lados era imposible defender eso. Uno de los rayos
desgarro mi bolsillo y el gear cayo al suelo, mientras sonaba con la
tonada de barbie girl.
-Nico, podrias atender si sos tan amable- dije escupiendo algo de sangre.
//Resistencia// [dice]0[/dice]
//Healing field// Turno 3/7 //Cuanto me cura// (1 y 2= 1 herida, 3-4= 2 heridas, 5-6= 3 heridas) [dice]1[/dice]
Las heridas quemaban como mil demonios, pero no podía permitir que hirieran a ocelot.
-Dejenme esto a mi, ustedes regresen a la torre. Khali, protegelos-
Kabir se preparó para plantar cara a los monstruos esos. Regresar a la
torre, me preguntaba que tan buena idea era, la calle era un caos pero
habiamos cumplido, estabamos cerca de la barrera, que parecia estar por
caer.
-Baraddur, vamos, ayudemos en la torre-
El Sandygast volvió a mi lado mientras la cosa amorfa parecia estar
aturdida, ambos sabiamos que no podiamos atacar como en la pelea con
Siiva sin golpear a más inocentes que enemigos. -Mint... Tenemos que volver-
Friendly reminder: Entró el flinch del turno anterior, bicho horrible no pega este turno. Y Sandygast full HP por Nurse skill
Kabir nos dijo que él se encargaría y era mejor nosotros no podríamos
hacer nada contra este enemigo era muy fuerte y podemos arriesgarnos a
sufrir perdidas y molestar así nos fuimos corriendo hacia la torre. -Vamos chicos- les dije a kaeru, oberon y mina que estaban mirando con miedo a la criatura.
El
motor rugia mientras Nitta acelero dejando atras el caos de la avenida.
Las alarmas de varios autos abandonados en medio de la avenida sonaban y
alumbraban los callejones. Frost de golpeo la cabeza mas de una vez
cuando agarraron la parte empedrada de la calle mientras Kileo trataba
de dar indicaciones a la conductora cuando estaban por estrellarse
contra un poste. Las calles se hacian mas angostas en direccion a las
plazas, por donde pasaron rapidamente girando sin reducir la velocidad
por las glorietas. La radio parecia no tener la mejor recepcion, ya que
se escuchaban fragmentos de una cancion con estatica y sonidos que
parecian no provenir de este mundo. La conductora por un momento se
distrajo hasta que uno de sus acompañantes la devolvio en si.
-MEDUSA!!
La
chica pudo esquivar rapidamente a la extraña criatura y doblar en la
esquina del Boulevard norte. Conducian casi pegados a la barrera de
energia, apenas pudiendo ver que habia del otro lado, pero por algun
motivo la recepcion de la radio mejoro en aquel lugar, primero pudieron
escuchar una cancion que estaba sonando, pero luego, parecian escuchar
un reporte de un noticiero.
Breaking
all the chai---iptal de Kalos se encuentra bajo un ataque, si bien las
autoridades indican que es una alarma minima, no se sabe nada de lo que
esta ocurr.--ll the bad behind me-.
La entrenadora
giro bruscamente viendo el espejo retrovisor, cerca de 5 criaturas los
seguian, mas otras tres que se habian sumado al llegar al Boulevard. La
chica acelero esquivando motos y autos abandonados mientras tocaba la
bocina tanto para que la sigan como para que nadie quede aplastado por
la camioneta. En el frenesi, la chica casi olvida frenar cuando las
luces delanteras iluminaron de lleno a Jaime en la cara. El chico se
tapo las manos con la cara y retrocedio pensando que eran sus ultimos
momentos.
Delante estaban Nico y Maxwell, el ultimo con algunas
lastimaduras. Jaime lucia herido tambien y algo mas palido que de
costumbre, se froto los ojos varias veces al ver a los entrenadores
saludando desde el interior del vehiculo. La criatura que estaba a unos
metros de sus compañeros lucia mucho mas herida que las demas que habian
dejado atras, incluso levitaba al raz del piso.
-De donde sacaron eso? Egh...no, no se si quiero saber.- Dijo Jaime
...metimes
that it ain’t ea-onsejal de Defensa de Kalos indico que la zona esta
siendo despejada y esta todo bajo control, fue meramente un simul..-at
it gets hard
La radio volvio a interrumpir, fue
entonces que vieron hacia el centro de la ciudad. La Torre Prism estaba
envuelta en una luz celeste, y el portal parecia estar ramificandose,
parecian pequeñas venas de luz que circulaban por el cielo de Lumiose.
En el centro de dicho portal, pudieron ver algo mas. Pudieron ver lo que
habia del otro lado. Un circulo gigante en el cielo, casi del diametro
de la plaza central, se habia abierto en el firmamento. Del otro lado
veian un mundo oscuro, con rocas que brillaban tenuemente. Del interior
vieron descender sobre la torre a una criatura envuelta en una capa de
viaje.
Julia descendia del firmamento lentamente rodeada de la
misma aura roja que las criaturas invasoras. Jaime miro la figura de la
chica que habia estado buscando. Los entrenadores vieron como cerro sus
ojos con fuerza y cerro su puño en torno a la daga que la chica le
habia dado.
-Gracias por todo...eh...amigos? - Dijo Jaime mirando hacia el piso. - Creo que...ya se que es lo que tengo que hacer. Lo que Julia me pidio que haga.
- El chico miro la daga que tenia en sus manos. Un destello celeste los
cego por un segundo y pudieron ver que alrededor del grupo, cinco
figuras danzaban en circulo. Los Unowns de la chica. Una ultima esfera
de luz aparecio. Una DuskBall que cayo al piso a los pies del muchacho.
Los Unowns U, L, T, R y A rodearon al joven Gautier quien tomo la ultima
DuskBall en sus manos. Comprendio que aquel era el ultimo Pokemon de
Julia. El muchacho levanto la mirada, su expresion era otra a la del
chico que habian conocido en Laverre. - ...tengo que ir a la torre. Hay que cerrar eso.
Vi
pasar toda mi vida delante con cada curva que Yannick daba. La
situacion ya de por si parecia salida de un sueño muy surreal. Yannick
manejando, yo al lado, una espada fantasma en medio, atras Samuel, en
medio Karen y en el otro extremo Blake herido por habernos protegido.
Como podia, trataba de cantar siguiendo la melodia de lo que sonaba en
la radio, pero habia bastante interferencia. De todas formas, me deje
llevar por el sonido y trate de transformarlo en algo propio.
-Sabes, creo que esto si se parece a Shalour despues de todo. Dijo Karen al mirar por la ventana de atras.- Tres o cuatro de esas cosas nos seguian. Era lo que queriamos, no?
-No podes cantar otra cosa? Sabes que me gusta algo mas rapido...por ahi algo de...- Samuel se inclino hacia adelante pero con un giro brusco de Yannick cayo de nuevo contra el asiento de atras.
-Quizas
cuando no estemos siendo perseguidos por criaturas sacadas de un cuento
de terror de Lovecraft me pueda concentrar mejor en la musica. -
Dije algo irritado. Odiaba los viajes de este tipo. Mire a Yannick de
reojo, espero que no este nervioso por la situacion, al menos, no
nervioso. Incomodo seguro.- Hey, esto del auto fue una gran idea, nos estan siguiendo y podemos mantenerlos alejados, ademas ahi esta el Boul--
Me estrelle contra el vidrio lateral a mitad de la oracion en un giro
que tuvimos que dar en una glorieta. No solo teniamos que esquivar autos
abandonados, teniamos que esquivar gente, motos, y esas cosas que nos
seguian. Y para peor, algunas nos tiraban rocas.-
Entonces Samuel
hizo algo estupido. Muy propio de el. Saco la mitad del cuerpo por la
ventana y empezo a provocar a las criaturas para que nos sigan, sumado a
los bocinasos. Mas de una vez estuvo a punto de perder la cabeza con
una piedra lanzada por esas cosas.
Llegamos al Boulevard y
pudimos frenar justo a unos metros de la barrera. Para mi alivio, al
llegar las criaturas estaban dando vueltas desorientadas ahora. Habia
otras mas, quizas el resto de los grupos lo habia logrado. Samuel se
bajo del auto sacando lo que quedaba de el por la ventana, mientras que
Blake abrio su puerta. Entonces miro a Yannick y luego me miro.
-Es bueno verte, Ian. - Dijo finalmente. - Le queda bien tu gorro. - Dijo mirando al conductor. Oh, aca vamos.- Nosotros vamos a mantener a esas cosas en este lugar, ustedes vuelvan a la torre. Hay...algo, saliendo de ahi. - Dijo mirando hacia el cielo. El portal se habia agrandado notablemente.- Y por cierto...Espero que no sigas cometiendo errores.
Y
se bajo. Sin mas. Queria estrellarle la cara contra el pavimento, pero
le hice una seña a Yannick para que arranque hacia el centro lo mas
rapido que pueda, la barrera parecia estar en sus ultimas. Guarde
silencio gran parte del viaje mirando de reojo hacia el Boulevard.
Finalmente...
-Umh...quizas todo eso haya sido algo raro para vos, no?- Dije mirando por la ventana sin prestar atencion-
Blake...parece cambiado. A veces la memoria nos juega malas pasadas,
pero...no, ese tipo no cambio. Yo...fui muy tonto durante mucho tiempo,
digamos que...le hacia caso en muchas cosas que no debia, el se
encargaba de que siempre que estaba por alejarme yo volviera, eh...yo
estaba...algo...eh...
-Estabas enamorado y él lo sabia, y se aprovecho de eso. En resumen..
- Dijo Karen. Juro que escuche que Yannick freno con fuerza y se asusto
tanto como yo al escucharla. No, no sabia que seguia aca.
Bueno...ahora sí, si una de esas cosas me mata, creo que me ahorraria pasar mas verguenza.
Por
fin el calamar parecía estar en las últimas, luego de todos nuestros
ataques parecía a punto de caer. No solía enorgullecerme por mucho, pero
mentiría si dijera que ver aquello no me hizo sentir bien. Por más que
el pescado del Doc fuera el que estaba haciendo la mayoría del daño.
Y hablando de eso...
-Che, Doc. -Me giré hacia él, sacando algo de mi bolsillo. Era un collar con una gema azulada, la cual tenía forma de lágrima. -
Me olvidé de que tenía esto. Se lo iba a dar a Taako al principio, pero
creo que el pedazo de carbón ese le gusta más asi que... tomá.
Escuchamos un motor cerca, y de la nada apareció una van que casi choca a Jaime. De ésta salieron Frost, Nitta y Kileo.
-Ey, no sabía que teníamos un vehículo. -Comenté con una sonrisa. -Que rapido que vinieron, por cierto. Deben haberlos hechos mierda a esos calamares.
Hubo
un silencio corto e incómodo, en el cual me acerqué a Taako y lo
devolví a su Pokebola. Ya había hecho demasiado durante esta pelea, y
era posible que necesitara alas para lo que venía ahora. De la que
estaba en mi otra mano apareció Sloane, haciendo una pirueta mientras
volaba.
-
Creo que esto me está gustando tanto como correr -dije mientras daba un
violento giro con el volante para dar vuelta en una curva. Aquellas
cosas nos estaban siguiendo, pero ahora eran más y si nos deteníamos
estábamos fritos. Claro que mi mejor idea fue meter el acelerador a
fondo y entrar a esquivar vehículos y personas a diestra y siniestra. E
insisto, lo estaba disfrutando más de lo que esperaba. Le había
entregado a Kileo el mapa de la ciudad que había conseguido hace unos
días cuando me dieron unos folletos en el centro, donde está la torre.
No a Nicholas porque... bueno, parecía un poco molesto luego de haber
pasado por el camino empedrado, y necesitaba estar concentrada y no
distraerme con su mal humor. Estos principiantes que saben poco de
caminos empedrados, y de piedras en general(?). Ahhh, pero en el baile
preferías otra cosa. Ahora no, conciencia. Necesito dormir, ya estoy
comenzando a hablar sola. -¿Están bien allá atrás? -pregunté sin
dejar de mirar adelante. Me estaba refiriendo a Kileo y al cuerpo del
fletchling- En serio necesito que lo cuides -agregué dando un pequeño
vistazo hacia atrás , dejando que mi mirada hablara más por mi que otra
cosa.
Y nada como esquivar una medusa. Aunque creo que si le dábamos de lleno, la que peor la hubiese pasado hubiese sido ella.
Me
vi tentada a prestarle atención a las señales de la radio. Como era de
esperarse, poco era lo que contaban de la realidad. Y estábamos
aislados, no sabíamos realmente que sucedía del otro lado. Esto era un
desastre... y no quería se extendiera por el resto de las regiones. Si
llegaba a Johto... no tendría más opción que regresar a proteger mi
hogar. Y estoy segura de que mi papá pensaba en lo mismo. Esperaba que
estuviera a salvo.
Antes de que nos diéramos cuenta habíamos
llegado a la apertura de la avenida en la que debían de estar Nico y
Max. Y casi atropello a Jaime. Dejé el vehículo en marcha mientras
me asomaba a saludar por la ventanilla, bajándome un poco los anteojos.
Creo que ver el mundo en rosa y amarillo lo había vuelto un poco menos
desagradable y me había ayudado a conducir mejor. -¡Jaime! ¡Estás
bien! -festejé un poco nerviosa y a la vez marcando el hecho de que no
le había pasado por encima- De hecho, todos estan bien, es un alivio
-dije un poco más calma mientras descendía al notar que la criatura
cerca de ellos parecía estar muy debilitada y las que nos seguían debían
de haberse quedado en la barrera. Además necesitaba tomar un poco de
aire e intentar tranquilizarme. Mis piernas temblaban un poco al igual
que mis brazos, como resultado de la vorágine.
Entonces miré
hacia la torre. Si bien las primeras grietas se habían cerrado, la
central parecía comenzar a extenderse... de otra forma. Creo que la
mejor forma de explicarlo era... como raíces. El árbol principal extaba
creciendo y necesitaba extender sus dominios para mantenerse con fuerza. -
¿Esa es Julia...? -pregunté observando a la figura que flotaba en el
aire. No la había podido observar con atención cuando la encontrabas
porque bueno... estaba enfocada en otro tema. Y ahora, verla así era...
extraño. No llegaba a distinguir desde donde estábamos si se encontraba
consciente o no pero... era evidente que no estaba bien, y que aquellas
cosas de algunas forma debían estar influenciándola... ¿O no? El aura
que la rodeaba, similar a la de las medusas...
//Percepción + Ocultismo porque insisto en ver cosas locas de bruja// [dice]0[/dice]
Al voltearme a escuchar a Jaime, noté el cuchillo que tenía en la mano, y a los unown, girando a su alrededor. -
Urien... -susurré- ¿Realmente vas a irte? -el tiempo que había pasado
con el unown era muy corto, pero era mucho más del que esperaba pasar
realmente con uno en algún momento en la vida. Y él había sido el
comienzo de que todo se destapara, aquello que estaba conteniendo...
-
¿Realmente estás seguro de lo que estás pensando? -le consulté a Jaime
observando una vez más su cuchillo- ¿Cómo estás seguro de que... con
hacer eso todo se detendrá? -era casi el cliché de una tragedia. Había
leído suficiente durante mi infancia como para hacerme una idea del
recurso 'alguien debe morir para que esto se detenga'. Y algo me decía
que no iba a ser la solución. -Sin embargo, sí estoy de acuerdo en
que debemos cerrar esa cosa, vayamos a dar una mano a la torre -volteé y
comencé a caminar hacia la van, lista para que el resto suba y
llevarnos hasta allá. Pero el asiento del conductor estaba ocupado por Nicholas.
Me quedé mirándolo como diciendo “¿Tenés idea de lo que estás haciendo?”, bastante molesta. -
Como sea -me acomodé los lentes y fui hasta el asiento del acompañante.
Le pedí a Kileo que me pasara al fletchling. Lo sostuve con fuerza
contra mi cuerpo y lo observé con algo de pena. Debía darle un descanso
digno, al menos a él. -Vamos -dije alzando la vista al frente con
firmeza- Y si le ocurre algo a Celeris, juro que voy a destrozarte esos
lentes. Prefiero mirarte directamente a los ojos, es un desperdicio que
los cubras -noté un silencio particular, y varias miradas dirigidas a
mi- ¿Qué? ¿Lo de Celeris? Bueno, la camioneta necesitaba un nombre ¿No?
-Eso me va a dejar una marca.-
Dije mientras caía luego de haberme pegado la cabeza por 5ta vez, si no
fuera que estamos siendo perseguidos por una ejercito de medusas me
hubiera quejado mucho mas pero no era el momento, ni el cinturón parecía
detener los baches, en qué mierda gastan en esta ciudad que no
mantienen ni una calle como la gente? Kileo gritaba direcciones a la
hippie sobre donde ir a medida que avanzábamos, la radio parecía estar
captando una señal pero costaba. -MEDUSA.- Grite
al notar que íbamos a chocar con una de esas cosas, lo que menos
necesitábamos en este momento. La chica pego un volantazo, me sostuve
con fuerza del cinturón de seguridad para no golpearme contra nada.
Estábamos
contra la barrera, no se podía ver mucho del otro lado pero por lo
menos la radio parecía andar mejor, música se mesclaba con el noticiero,
parecía ser que se estaba corriendo la voz de lo que pasaba en el resto
de la región, aun que como siempre las autoridades trataba de disminuir
el caos. Mire hacia atrás por los espejos del auto, cinco medusas nos
seguían a la vez que hippie tocaba la bocina del auto a todo volumen
para llamar más la atención de todos los seres posibles. Cuando volví a
mirar hacia adelante teníamos a Jamie, carajo, lo iba a chocar, me
sostuve con fuerza nuevamente cuando la muchacha presiono el freno con
fuerza, la guantera de la van se abrió cayendo una pokeball de ella
junto con lo que parecían millones de tickets de multas y demás.
Abri la puerta de la van para poder pararme y observar mejor al cielo.
La grieta sobre la torre parecía estar ramificándose más sobre el
cielo, del otro lado se observaba una especie de círculo como si se
tratara de otro mundo con algunas rocas flotando por allí. -No…- solté
levemente al ver como una silueta descendía de ella, esa capa de viaje
ya la habíamos visto antes en varias visiones, Julia estaba cubierta en
un aura roja que la envolvía como si fuera otra criatura. -Carajo.-
Jamie
miro hacia su daga antes de que un brillo me obligara a taparme los
ojos, los 5 unowns ahora flotaban alrededor del chico mientras una nueva
pokeball caía al suelo sobre los pies del muchacho, debía tratarse del
último pokemon de julia. El joven levanto la cabeza mirándonos, parecía
distinto, casi no reconocía al muchacho que habíamos conocido en el bar
de Laverre. - ...tengo que ir a la torre. Hay que cerrar eso.-
Me preocupe un poco ante las palabras del muchacho pero sabía que era
necesario lo que sea que piense hacer, no podemos hacer otra cosa más
que esto.
Entre a la van y levante la pokeball que se había
caido, adentro había algo que parecia ser una especie de cosa con nariz
roja, guarde al narigon en la guantera, definitivamente iba a estar mas
seguro ahí que con nosotros afuera. Hippie se había bajado para hablar
con el resto lo cual me dio la oportunidad de tomar el volante, le
sonreí al ver su cara de desconcierto cuando me vio tomar su lugar de
conductor.
Respire hondo ajustándome los guantes y acomodándome
los lentes, las criaturas aun nos estaban siguiendo y teníamos que
arrancar ya, la muchacha entro un poco enojada ocupando el asiento al
lado mio, -Vamos. Y si le ocurre algo a
Celeris, juro que voy a destrozarte esos lentes. Prefiero mirarte
directamente a los ojos, es un desperdicio que los cubras -. No
pude evitar soltar una risa al escuchar que había nombrado a la van, de
donde saca esos nombres? Me saque los lentes y se los guarde adentro de
mi bolso mirándola con una gesto de “te parece mejor ahora?”.
-A ver señores, tenemos una torre a la cual visitar, entren de una vez y dejen de jugar con ese alien multidimensional.-
Grite sacando la cabeza por la ventana del conductor. Volví a mi lugar y
di marcha atrás para colocar el vehículo en un lugar donde pudieran
entrar todos. -Bienvenidos al Expreso Celeris,
si ven a su derecha podrán observar como el mundo amenaza con ser
destruido por una grieta gigante, si miran a la izquierda lo mismo pero
con 5 medusas aliens. Sugiero que se agarren porque hace mucho que no
manejo.-Terminado de decir eso apreté a fondo el acelerador con dirección a la torre.- Creo que si sobrevivimos a esto vamos a tener buenas historias para contarles a nuestros nietos.-
Le acabo de decir eso en voz alta a la Hippie? Si, definitivamente lo
hice, donde hay una medusa en este momento? Ah, alla atrás hay cinco.
La
mayor parte de la vuelta fue en silencio, algo más tranquila ahora que
no éramos perseguidos, no me hubiera molestado si no fuera porque sentía
lo mal que lo de recién había dejado a Ian. Silencio incómodo en un
auto, sí, esto me hacía pensar demasiado en Alan. Quería decir algo pero
no sabía por dónde empezar, pedirle perdón por haberme preocupado por
Blake? No estábamos en condiciones de dejar que mataran a uno de los más
fuertes, pero imagino que no fue muy ubicado de mi parte... Y me
distraje con boludeces... Tendría que haberme enfocado más en Ian... La
advertencia en mi mente volvió a amenazar con empezar. Me concentré en
la calle y en la estática que salía de la radio.
Había intentado
guardar a Ehre pero se negó, una de las pocas veces que se ponía así de
terca. Sabía que era por la situación, estaba cumpliendo lo que tendría
que haber hecho antes, así que preferí no insistir. Igual, no me
alegraba tener algo así de filoso suelto adentro del auto, era más
peligro que yo atrás del volante. Al menos se había enfundado y estaba
agarrada con su cinto de la cabecera del asiento.
Por fin Ian
comenzó a hablar, tuve que obligarme a no quitar la vista del camino,
aunque admito que no estaba prestando tanta atención como debería. -A veces la memoria nos juega malas pasadas...- Se me hizo un nudo en el estómago pero no lo quise interrumpir. Entonces Karen lo hizo. Karen, que pensé se había bajado con los otros dos en el Boulevard. Pegué una frenada sin querer y casi se volvieron a golpear.
No
pude evitar reírme, si no era por lo que dijo era porque ninguno se
había dado cuenta que estaba todavía acá y por mi reacción exagerada. -Perdón, no, es que... te entiendo. Un poco.- Me pasé una mano por la cara, sospechas confirmadas, coincidencias. -Vamos a tener mucho de qué hablar después... Bah, de lo que te sientas cómodo contándome, no sientas que me debés más.-
Y si es que sobrevivimos. En realidad parte de mí no estaba del todo
seguro si quería tener esa conversación. Capaz sea mejor que me vuelva
más honesto con ciertos temas, aunque eso signifique... Sacudí la
cabeza, es un problema para otro momento.
-Soy partidario de creer que la gente puede cambiar para bien pero... no sé lo que te habrá hecho, no es mi lugar juzgar eso.- Me encogí de hombros, un poco más serio. -Me recuerda a alguien que conocía, supongo que lo de recién debe haber sido mil veces peor para vos...- Miré el volante, inconscientemente cerré mis puños alrededor del cuero sintético. -
Pero no digas que te lo estás acordando mal. Sin importar la persona que
sea ahora, no cambia lo que haya pasado; y si pensás que te merecés una
disculpa, o no querés verlo nunca más, eso sigue siendo real.- Suspiré tratando relajarme y no pensar demasiado al respecto.
-Por cierto, vos serías Karen, no?- Me di vuelta y le di la mano. -Yannick.- Sonreí antes de volver a arrancar.
Estábamos
bastante cerca de la Torre y se podía empezar a distinguir una figura
en el portal cada vez más grande, era... Julia? Me ponía demasiado
nervioso mirarla todavía. Espero que los otros estén bien, ya tendrían
que haber terminado, capaz estén volviendo también... Aunque no tenía
idea de qué íbamos a hacer ahora con ella. Traté de sacar alguna
conversación para no mencionarlo. -Che eso de Shalour debe haber sido bastante intenso si se pareció a esto.-
El
ave envuelta se sentía rara. Cuando las personas piensan en un muerto
se le viene a la cabeza la falta de temperatura y el rigor mortis, pero
cuando es un ave que acaba de morir es distinto. No se sentía fría (su
plumaje conservaba algo de su temperatura) y estaba lejos de estar
tiesa, prácticamente carecía de sostén. No era el primer pokémon muerto
que veía… o que tenía en brazos. Flashes de esas situaciones pasadas
cruzaron por mi cabeza. Sabía que todos ellos habían caído por los gajes
de mi oficio, pero mantenía mi consciencia tranquila (aunque costaba).
No puedo decir que nunca haya atrapado a algún pokémon a la vieja
usanza, pero puedo asegurar que siempre les di la opción de no
acompañarme en mis trabajos. No recuerdo a alguno que me haya dicho que
no. Tal vez mi culpa recae en no haberlos detenido. Es fácil saber lo
que tenías que hacer una vez que ves cómo salieron las cosas.
Nitta
me saco de mis pensamiento revoleándome un mapa de la ciudad. Lo
sostenía con la mano libre y le indicaba la mejor ruta para que esos
bichos no nos alcanzaran.
-En la próxima doblá. La que viene. ¡Esta!¡ESTA! Bien, ahora seguí hasta que veas un negocio de ropa y…
Continué
indicándole cómo llegar en una pieza (o lo más parecido a eso) hasta
dónde se en encontraban Jaime, Nico y Maxwell. Nitta demostró ser muy
diestra en la conducción y muy afín al empedrado no tan amistoso para
mis nalgas. Esquivábamos gente, pokémon, autos, escombros, hasta a las
mismas medusas que se iban sumando al ¿cardumen? ¿manada? ¿escuela? No
sé cómo llamarlos, en fin, a los cosos que ya nos seguían. “¡¡MEDUSA!!”
gritó Frost prácticamente al lado de mi oreja y casi hace que se me
caiga mapa, pájaro y todo al carajo. No chocamos y seguimos camino. En
la radio que cada tanto captaba señal, se podía oír cómo las autoridades
desestimaban toda esta situación. Esto era algo gordo en serio, ya lo
sabíamos, pero que los medios de prensa estén tapando por orden de las
autoridades toda esta situación lo confirmaba. Aunque, si tan informados
estaban, puede que los refuerzos no tardaran en llegar. O conviertan
esta ciudad en un cráter… lo que se les ocurra primero.
Alcanzamos
al otro grupo dejando bastante atrás a las medusas, aunque su luz roja
podía verse acercarse. Al bajar de la van, la Torre Prisma se iluminó
bruscamente. La grieta se expandió aún más ramificándose, dejando ver un
mundo extraño de rocas luminosas. A esa altura, para mí era cómo debía
de verse el infierno. Una figura flotaba cerca de la brecha. Cruce
miradas con el resto. Todos sabíamos de quién se trataba. Estaba rodeada
de la misma luz roja que esos entes alienígenas.
“Creo que... ya sé que es lo que tengo que hacer. Lo que Julia me pidió que haga.”
La
daga en la mano del muchacho Gautier me daba desconfianza y había que
sumarle lo que acababa de decir. Miré automáticamente hacía donde se
encontraba la chica flotando como si ella pudiera formar parte de la
conversación, responder o reaccionar a lo que acababa de decir Jaime. No
pude decir nada que todos los Unown de la guardadora salieron de sus
pokeball y nos rodearon para luego concentrarse alrededor del joven.
Arturo salió en un destello desde el dispositivo en mi cinturón. Me miró
con su único ojo. Le sonreí.
- Gracias por la ayuda que me diste
y por, bueno, salvarme de los terremotos. - me hizo una pequeña
reverencia y se fue a acompañar a sus hermanos.
Jaime seguía
preocupándome, pero no había tiempo ahora: Las medusas se aproximaban
más y más. Volvimos a subir a la van que ahora parecía haber rotado de
conductor. Nitta no parecía del todo feliz al respecto y me pidió al ave
que aun sostenía en brazos.
“Y si le
ocurre algo a Celeris, juro que voy a destrozarte esos lentes. Prefiero
mirarte directamente a los ojos, es un desperdicio que los cubras”
OK,
le puso nombre a la v… ¡¿LE HABÍA TIRADO ONDA A FROST?! No, Kileo, no
es momento para estas cosas. El Día del Juicio estaba en puerta y había
que mantenerla bien cerrada.
Seguimos viaje hacia nuestro
siguiente destino, pero un estruendo no llamó la atención. Al pasar por
una calle, pudimos ver a un Onix en frenesí, probablemente por toda la
situación. Lo más alarmante era que las sacudidas de la serpiente de
piedra amenazaban con vencer la base de un gran edificio que tenía al
lado. Le pedí (prácticamente le supliqué porque no tenía intenciones de
hacerlo) a Frost que se detuviera así poder intentar hacer algo.
Resongó, me cuasi puteo y terminó accediendo. Hasta bajó conmigo
diciendo algo de que me iba a terminar matando o algo así.
- Gracias oficial. Es bueno poder contar con el servicio de... - me detuve al ver que amenazó con volver a la van.
La
gigantesca criatura se sacudía enfurecida. Traté de parecer lo menos
amenazador posible (aunque para tal criatura, no era más que un
guijarro). Pudimos ver que cerca de él había otros escombros y por
debajo se llegaba a ver un cuerpo sin vida. El Onix parecía estar
protegiendo ese lugar en particular. No había que ser muy despierto para
entender que su entrenador fue víctima de esas cosas y a su pokémon no
le hizo ni un poco de gracia.
- ¡Hey!¡Tranquilo! - la criatura me
miró y no voy a decir que no me asusté. - Si no te calmás, vas a tirar
abajo ese edificio y vas a producir más heridos o peor, otros podrían
terminar como él. - le marqué la pila de escombros con el muerto abajo.
La criatura miró a su entrenador sin vida y al edificio que estaba por
derrumbar. - Yo sé lo que sentís y también sé qué fue lo que provocó
esto. Si querés hacer algo al respecto, te invito a ayudarnos a
enfrentar esas cosas. - Parecía calmarse, aunque cabizbajo. Entre los
escombros, Frost pudo encontrar la pokeball que pertenecía a la rocosa
criatura y lo devolvió a ella.
“Tomá, quizás te vaya a servir aunque un Corsola te hubiera quedado mejor.”
Un
escalofrío (o varios, como seis) recorrieron mi espalda por alguna
razón. Pero me tomé la esfera y me hice cargo de la criatura. Era
momento de llegar hasta esas cosas y terminar de una vez con todo esto.
Corrimos de vuelta a la Prism Tower, el camino parecia más largo que
cuando nos alejamos. Estaba cansada, corriamos y esquivabamos pozos y
piedras, nos detuvimos un momento para tomar aire. -A este paso... no creo que lleguemos...-
Dije entre largas bocanadas de aire. Como respondiendo a mis palabras,
el cielo seguia abriendose y ahora alcanzaba a verse algo del otro lado
de la grieta sobre la torre. Era algo que nunca habia visto, no podria
describirlo, algo que jamás habria esperado ver. -Otro mundo...-
Algo
pareció bajar desde esa grieta hasta la cima de la torre, se veia
distinto a las bestias que veniamos enfrentando pero no tanto, podia
verse un brillo rojizo alrededor. -Qué era eso?- Le pregunté a Mint, esperando que él pudiera ver mejor.
-Tenemos que seguir, pero si seguimos esquivando pozos y derrumbes no llegamos, tal vez...- Tomé las pokeball de Mavis y Baraddur. -Baraddur, necesito que descanses hasta llegar a la torre- Dije guardando al Sandygast -Mavis, te necesitamos- La Ralts se materializó en frente nuestro, me incliné para explicarle pero el cansancio hizo efecto y casi tropiezo -Estoy bien- Dije mientras la pequeña se acercó a mi y extendió sus bracitos, emitiendo un leve brillo que me envolvió.
/Healing Pulse a mi cara, tiro dado por cortesia, no dice nada la planilla/ [dice]0[/dice]
-Mavis... Gracias-
Le dije mientras veia mis heridas cerrarse, las marcas habian
desaparecido también, pero seguramente se habian borrado antes sin que
lo notara, estaba aprendiendo a usar ese poder, Nicholas habia dicho
algo, tal vez... No era el momento, teniamos que irnos ya. Respiré
profundo una vez más -Mavis, subite- Le dije señalando mi hombro. -Mint,
tenemos que correr. Mavis, necesitamos que nos ayudes a seguir derecho,
cuando lleguemos a un obstaculo, teleportanos al otro lado y nosotros
seguimos corriendo, no vamos a parar hasta llegar-
/Mary's Child/ /No tirada para que me siga el plan/ /Teleport de 20 metros -> Ralts lvl20/
Todos
nuestros golpes estaban funcionando y se veía que la medusa no podía
dar mucha más batalla. Nico se me acercó con su sonrisa carismática, no
podés evitar sentirte feliz con solo mirarlo, tienen esa aura que no sé
es dificil de explicar… tienen que verlo para entenderlo.
“Me
olvidé de que tenía esto. Se lo iba a dar a Taako al principio, pero
creo que el pedazo de carbón ese le gusta más así que... tomá.”
Mire
la piedra con detenimiento tratando de entender un poco de qué estaba
hecha, era transparente con un tinte de azul y fría al tacto. Podías
sentir como si te mojara al tenerla en la mano, aunque estuviese seca.
Se
la puse de collar al pequeño ocelot y la piedra comenzó a cambiar de
forma. Una pequeña luz se deslizó por su cuerpo y formó un pequeño
brazalete en una de sus aletas. La piedra ahora en adorno brillaba con
intensidad.
-Oh gracias Nico, disculpa, yo no tengo nada que
darte- le dije triste- terminemos con esto, no podemos dejar que esa
cosa siga lastimando gente.
//Moody// +3 ataque +1 Def +1 Def esp.
//Waterfall 30 (10)+30// +3 éxitos [dice]0[/dice]
//Flinch// 9-10 [dice]1[/dice]
Mis habilidades volvían a sanar mis heridas. Seguramente ahora estaría muerte de no ser por ellas.
//Healing field// Turno 4/7 //Cuanto me cura// (1 y 2= 1 herida, 3-4= 2 heridas, 5-6= 3 heridas) [dice]2[/dice]
//Cure minor wound// [dice]3[/dice]
En medio del combate una bocina y unas luces se pudieron escuchar.
-¡Cuidado Jaime!- le grité al joven al ver como el vehículo se le venía encima.
Pero
por suerte se detuvo antes de golpearlo. Eran casi todos del grupo más
unos agregados, Blake, Karen y Samuel estaban con ellos . Busque por
todos a Salem y a Epiphone, pero no había rastro de ellos, rezaba al
cielo porque estén bien. Tampoco estaban ni Mint e Ibaraki, pero ellos
sabía cuidarse bien, ya me lo habían demostrado.
Corríamos tan rápido que empezaba a jadear y me preocupaba kabir espero que esté bien. Seguíamos
avanzando hacia la torre cuando el cielo se empezó a fracturar algo
extraño parecía salir de ahí y escalofríos me provocaba es esta
sensación lastima a mi corazón nunca la senti, iba ne preguntava si veia
bien lo que salia del portal - parece una chica pero aun estamos muy
lejos como para confirmarlo bien podria ser otra criatura. Una oscura presencia se acerca y ver otro mundo desde el cielo sólo me causa temor. Mientras corria el tiempo parecia detenerse y me preguntaba como llegue a esta situacion precenciando el posible fin del mundo. Y recorde la razon por la que estoy aqui fueron dos cosas: mi hermana y una vieja carta.
~☆~
Mi
hermana habia escondido una carta y cuando lo descubri la enfrente el
contenido de esta era muy importante y lo que me dijo ella se quedo
grabado a fuego en mi memoria. -pero si no importa no debilucha como ella- Me enoje tanto que le clave el pincel en el ojo. Ella
no se altero mas bien sonrio y dijo -al fin una escusa util para
divertirme- cuando me di cuenta de lo que haria corri hacia la
habitación tome lo que pude y a kaeru y salte por la ventana despues me
perdi en el bosque al salir encontre la parada y use lo que tenia para
pedir un boleto. Tenia que reunirme con ella aunque fuera una ultima vez. Subi al vehiculo y fue ese el momento que cambio mi vida.
~~~
Pero la carta aun la tenia y aun la tengo estaba en el bolsillo la carta estaba un poco deteriorada pero legible.
Me empezo a doler la cabeza pero lo ignore y segui avansando.
Iba
cordino con su pokemon un plan para ir mas rapido y para apoyarla meti a
kaeru y a oberon a sus pokeballs y le dije a mina - vete adelantando
con cuidado ya te alcanso - y asi empezo a volar mas rapido
La
luz en el cielo hacia que casi parezca de dia. Los extremos del portal
estaban brillando con tal intensidad que mirarlos era similar a mirar
directamente al sol. Los ultimos momentos, incluso parecia que la luz de
aquella situacion habia absorbido incluso el sonido. Los entrenadores
subieron uno a uno al vehiculo que ahora conducia de una forma poco
elegante el entrenador del Trevenant. Jaime iba en la parte de atras con
la mirada fija en el piso y sus manos aun temblando en torno a la daga
de metal que Julia le dio. La DuskBall tambien temblaba en sus manos.
Los Unowns una vez dispoerso el grupo y cumplido su cometido, comenzaron
a girar alrededor de la van mientras avanzaba. El Unown A y el U
levitando muy cerca de la ventanas delanteras, casi como si no
quisieran despedirse de los entrenadores con los que habian compartido
las ultimas horas. Avanzaron por las calles muy rapidamente casi sin
mediar palabras, con miedo de aquello que podian encontrar.
Yannick
manejaba tan bien como podia dada la situacion, Karen mirando
intermitentemente entre ambos jovenes, y con Ian mirando hacia la
ventana algo sonrojado. La chica saludo a Yannick apretando su hombro y
sonriendo sin mas, pero cuando el muchacho saco el tema de Shalour, Ian y
Karen se miraron con algo de preocupacion. Finalmente, Ian miro al
conductor y se encogio de hombros.
-Fue algo...menos extremo. Pero tuvimos un trabajo muy complicado...y nunca supimos contra que peleamos, de hecho...
-Perdimos a alguien esa noche tambien. - Dijo Karen con un aire de tristeza- Al menos esta noche estamos todos respirando...
Yannick
miro hacia atras extrañado, lo cual hizo que casi pasen por ensima de
Mint e Ibaraki, quienes iban avanzando a pie visiblemente agitados y
acompañados por sus Ralts. El muchacho freno rapidamente y el coche casi
da un vuelco contra un poste que daba entrada a la glorieta de la
Centrico Plaza. Mareados y aun con la adrenalina corriendo por sus
venas, los jovenes bajaron del auto. La luz sobre la torre era cegadora,
incluso un zumbido parecia imposibilitarles el escuchar con claridad.
Se alarmaron cuando una van a toda velocidad se subio sobre el cordon de
la vereda y frenando solo a metros de llevarse por delante la reja de
la Torre Prism. Dentro de aquel vehiculo iban el resto de los
entrenadores que bajaron a tropel al ver a sus compañeros. Ninguno lucia
gravemente herido y estaban todos enteros.
El panorama en la
torre parecia ser completamente opuesto al caos de la ciudad. La plaza
estaba vacia, si bien los vidrios de la torre habian estallado y estaban
desperdigados por el piso, lo unico que alteraba la vision era la luz
celeste del cielo. Mallory y la lider de Anistar habian salido a sus
puestos en el Boulevard para detener a las criaturas que habian ido
hacia ahi. En la torre solo habian quedado Siiva, Neron y Akshara. Los
tres se dieron vuelta al ver la llegada de los entrenadores y luego
miraron hacia el cielo, indicando que su atencion debia centrarse ahi.
Vieron aquello que habian visto en la lejania. Era Julia efectivamente.
-No es ella.-
Dijo Jaime en un suzurro. La miraron descender del cielo, su cabello
flotaba como si estuviera sumergida en profundidades, su piel era blanca
sin ningun tipo de color. Si capa ondulaba de igual manera que su
cabello, y sus ojos brillaban igual que aquellas venas de luz que
atrevesaban la capital de Lumiose. Tentaculos de luz translucidos se
materializaban a su alrededor mientras descendia rodeada de aquella aura
roja, igual que el resto de las criaturas.
Siiva se puso en
guardia y se lanzo con su Drapion, pero fue cuestion de un segundo.
Cientos de rocas cayeron sobre la criatura aplastandola y cayendo cerca
de los entrenadores, que como pudieron se mantuvieron lejos del impacto.
Neron y Akshara cayeron a unos metros. La criatura miro hacia donde
estaban los entrenadores y Jaime, quien se aferro a la DuskBall que
habia aparecido delante suyo. Caian lagrimas de los ojos del muchacho.
La
Duskball se abrio en el cielo nocturno y una criatura alada salio de
ella. Jaime conocia bien a aquella criatura, la habia visto varias
veces. Era el unico Pokemon de Julia que conocia, aquel con quien
recorrio los cielos por primera vez. La feroz ave roja avanzos sabiendo
que tenia que hacer. Jaime se subio a su lomo del Braviary mientras este
levantaba vuelo. Los entrenadores se intentaron mover y reaccionar,
pero la criatura delanrte de ellos movio uno de sus tentaculos de luz y
una nueva descarga de rocas caia bloqueando el camino. Se cubrieron pero
pronto vieron una barrera de luz delante de ellos evitando que sean
golpeados. Akshara tenia su brazo extendido creando el muro de energia.
You can hear it right? You're nodding your head This fitting music Even if it's faint, and seems like it will fade away You can hear it right?
La
criatura se elevo en el cielo nocturno y varias de los otros seres mas
pequeños se congregaron a su alrededor. El Braviary parecia saber que
algo asi podia ocurrir y apesar de que sus ojos reflejaban lastima al
tener que embestir a su entrenadora, a la entrenadora que lo vio nacer
desde que era apenas un ave que no podia volar. El cuchillo de Jaime
brillo con aquella noche y los seres que se habian congregado alrededor
de Julia se alborotaron. El joven Gautier se agarro al Braviary con sus
manos temblando en torno al cuchillo, pero pronto, quedo a solo
centimetros del aura roja que emitia la chica. El Pokemon volador se
detuvo y se miraron un por momento que parecio eterno.
The flickering stars, this unknown darkness The half-moon is laughing I'm not lonely, I'm not sad You're smiling for my sake
Jaime
bajo el cuchillo. Sus manos aun temblaban, y si bien aquella criatura
no era la Julia que el conocio en aquel baile de mascaras. No era a
Julia a la cual el molestaba en cada ocacion que tenian, ni la Julia que
poco a poco fue ganando su confianza. El muchacho la miro bajando su
arma y miro de reojo la capital de Kalos. Los ojos de aquella criatura
parecieron romperse por un segundo y detras de aquella aura, los ojos de
Julia.
-Alyara...- Murmuro Jaime
recordando el verdadero nombre de la chica. La chica parpadeo y por un
momento volvio en si. Sus ojos se llanaron de lagrimas y el aura rojiza
se apago. El portal dejo de brillar con intencidad y los seres a su
alrededor parecian perdidos. La chica miro al Braviary y a Jaime
sonriendo.
-Sabia que no ibas a...- Dijo la chica sonriendo y acercandose a Jaime, sus manos rozaban sus mejillas y el muchacho comenzo a llorar. - El primer caído cruzara el umbral...Su alma perderá la forma. - Murmuro la chica, era la profecía que habian escuchado en el Sinodo.- Esa soy yo...el primer caido...-
Explico la chica mirando a los ojos al joven Gautier. - Abri un
portal...cruce al otro lado...y provoque todo esto...El mundo cambiara
de dueños...- La chica lloro mirando hacia la capital de Lumiose. Desvio
su mirada hacia los entrenadores a varios metros de distancia,
observando desde el piso. Sonrio.
The darkening sky, the teasing wind Even though our hands our cold I won't let go, I want to keep walking
Las
manos de Julia se posaron sobre las de Jaime. El muchacho reacciono al
frio y la falta de pulso de la chica. Sus manos eran casi como tocar
vidrio. La chica lo abrazo y junto con su abrazo, el filo de la daga
atraveso su vientre. Los ojos de la chica se apagaron mientras el arma
cortaba su piel y el aura rojiza a su alrededor desaparecia. Los seres
del otro mundo que se habian congregado alrededor ahora parecian
desorientados, incluso asustados. La chica miro hacia el cielo mientras
la vida se escapaba de sus ojos, el portal estaba cerrandose y las
criaturas regresaban, huyendo. Como si aquello que les permitia estar en
otro mundo ya no estuviera mas ahi. Julia sonrio y se desplomo sobre el
Braviary.
More than God, I believe in you It's just a little farther right? It's in front of us right? I'm not alone, I'm not alone
La
noche de Kalos volvio a ser oscura. El portal desaparecia lentamente
mientras las criaturas regresaban a su mundo, habiendo perdido su
anclaje no este. Jaime no desendio de los cielos, seguia con la chica
sin vida en brazos, con la mano que sostenia la daga temblorosa. Akshara
deshizo la barrera que evito que los entrenadores sean arrazados por el
torrente de rocas, y Neron sonreia mirando como el portal se cerraba.
Lumiose quedo sumida en el silencio mientras la barrera que la rodeaba
se fundia.
Sin ninguna luz electrica, la unica luz provenia del
cielo estrellado. Las calles de la capital de Kalos estaban aun sumidas
en la sombra de los astros.
Llegamos a la torre, agotados, lo siguiente que supe es que casi nos
atropepella un auto. Al frenar veo que bajan de ahi Yannick, Ian y...
Karen?, oh no. -Viniste a terminar la pelea en el Centro?-
Casi no pude avanzar antes de que Yannick e Ian me detuvieran, diciendo
que lo de ese día habia sido un malentendido. No fueron ellos sino la
mano de Mint en mi hombro lo que terminó de convencerme. -Bien... Vamos- Dije tratando de calmarme.
Ni
bien volteamos en dirección a la torre, otro vehiculo se estampa cerca
nuestro, uno bastante más grande esta vez, de esta salió el resto del
grupo, con el cual nos terminamos de reunir para seguir adelante. Una
vez adentro, nos esperaban tres personas no gratas, las cuales no nos
prestaron mucha atención y miraron al cielo, donde pudimos ver por fin a
la mismisima Julia, o tal vez no, su imagen era irreal, no podia
terminar de entenderlo, mi mente me decia que tenia que uir de ahí, pero
sabia que no habia a donde correr, la situación era tensa y era
cuestion de que alguien atacara primero, por supuesto alguien tenia que
intentarlo y ser brutalmente golpeado, esa fue Siiva.
El
siguiente fue Jaime, quien sacó un imponente pokemon y salió al vuelo,
junto con los Unown, luego ocurrió, Jaime apuñaló a Julia, no... Alyara,
en ese momento, un hechizo se rompió, lo que sea que tenia a la chica,
estaba desapareciendo, junto con su vida, me tapé la boca con las manos,
volteando para tratar de no verlo, pero podia oirlo todo.
Mint
estaba a mi lado, no pude resistir abrazarlo mientras unas lágrimas
caian por mis mejillas, no podia imaginar por lo que esos dos estaban
pasando, y esperaba nunca tener que hacerlo. Momentos despues, levanté
la mirada, el portal en el cielo se cerraba, las reacciones de todos
eran diferentes, pero hubo una en particular, Neron Gautier, el padre de
Jaime, simplemente sonreia, fue gracias a él que se desató este
infierno, gracias a él es que Jaime tuvo que matar a la mujer que amaba,
gracias a él, nosotros casi morimos en más de una ocación.
Solté a Mint y me dirigí al hombre, limpiando mis lágrimas con mi manga en el camino. -Señor Gautier- dije de forma casual, el hombre me miró como si estuviera montado en un Ponyta azul. -Quisiera darle una muestra de mi aprecio por todo lo que ha hecho-
/Piña a la boca del estómago/ /Fuerza + Combate C/C/ [dice]0[/dice] [dice]1[/dice]