Jaime
nos había revelado algo de lo que estaba haciendo, me costaba pensar en
Epi y como le había fallado. Antes pensaba que Jaime era el inutil,
capaz tendría que mirarme al espejo de vez en cuanto.
La van no estaba en condiciones y lo vi a Yan preocuparse.
-No te preocupes por eso, lo pagamos entre todos, después de todo, es como un miembro más casi. - le dije sonriendo
Eva termino de ayudar con la ropa manchada del herido Yannick. Y senti como mis heridas sanaban.
//healling field 1-2=1 herida, 2-3=2 heridas etc// [dice]0[/dice]
Un colectivo se acercó, parecia un vehiculo escolar, mientras kileo empujaba la van con su colosal pokemon.
Aunque
fuera de manera intermitente, la brisa de quien fuera que anduviera por
allí arriba volvió a hacerse presente. ¿Una amistad? ¿Quién sería? No
lograba reconocerla del todo. No, si era alguien del grupo... debía ser
alguno de los que llevaba tiempo sin ver, o los menos cercanos. ¿Pero
quién...?
Sin embargo, Reenira habló. -¿Al tanto de todo...?
-¿Incluso de lo que ocurrió con Rosen y Guilden? ¿De Galahad? ¿De mi
abandono? ¿De todo lo que ocurrió en Kalos? ¿De absolutamente todo lo
que pasó en la academia, de mis amistades, de mi trabajo? No tengo muy
en claro cuándo dejó de tener contacto con mi papá, pero por él no pudo
haber sido, nunca le contaría nada. Pero, ella sabía mucho, eso lo se
hace tiempo, siempre tiene forma de encontrar siempre la información que
requiere. Las cosas se vuelven mucho más claras cuando comprendés que era una guardadora.
-
Un laberinto... -intenté recordar alguna historia, alguna leyenda que
involucrara laberintos, pero las opciones eran pocas y no podía
asociarlas por completo a lo que ocurría. La cosa aquella seguía
emitiendo brillo y el ruido que invadía mi cabeza no me dejaba pensar
con claridad. Comenzó a emitir rayos, e instintivamente di algunos pasos
para atrás, empujando a Epiphone con mi hombro para que ella también se
corriera- Se supone todos los laberintos tienen una salida, ¿pero a
dónde quieren llegar con esto. ¿Y qué querían hacer con nosotras?
Los
rayos se intensificaron y una silueta comenzó a tomar forma entre medio
de la luz. No recordaba haber visto nada igual en libros o que alguna
historia la hubiese descrito. Extremidades largas, estatura alta. Y la
electricidad de aquella cosa... parecía provenir de la figura.
Debíamos escapar. Es lo único que pensaba.
Pero por el otro lado, una parte de mi no quería dejar a Reenira allí. No, Nit, piensa, recapacita. Ah. Me hubiese gustado quedarme... con la imagen que tenía de ella en el pasado. Pero se mantenía presente, por algo seguía allí.
//Percepción + Alerta// Remember I have dice charm [dice]0[/dice]
El
Pokemon psiquico recibio dos ataques conjuntos de los Pokemon de
Nicholas y Mint. La criatura quedo en el piso, apenas pudiendo
levantarse. Aprovechando el momento, el Karrablast de Samuel se lanzo a
rematar a la criatura psiquica, y con un golpe bastante potente dejo al
Gothitelle inconciente a los pies de un auto donde un enmascarado estaba
parado. Por otro lado, el Pokemon de Ibaraki se habia lanzado rodeado
de fuego a atacar al Pokemon oscuro del otro enmascarado. El golpe fue
directo y el cuadrupedo rodo por el piso con su pelaje algo chamuscado.
Aprovechando esa distraccion, el Pokemon de Ariadne salto entre los
autos preparandose para atacar en conjunto, pero un temblor en el piso
lo detuvo. El piso debajo de los entrenadores comenzo a quebrarse y
varios destellos de luz celeste salieron del anillo de luz.
-El Laberinto...ustedes lo vieron en Lumiose...-
Dijo un enmascarado observando ancioso el anillo de luz mientras la luz
en su interior aumentaba. Lentamente, la luz celeste de aquel anillo se
fue tornando en cian y verde, hasta tornarse de un amarillo casi
blanco. La luz comenzaba a ser muy distinta de aquella que habian visto
en Lumiose.- ....esto...que...?
Ocurrio
mas rapido de lo que cualquiera pudiera haber reaccionado. Una criatura
aun envuelta en luz habia salido de aquel vortice de luz, un gigante de
luz blanca de casi dos metros de alto. La criatura se lanzo con una
rapidez y violencia no propias de nada de este mundo, su victima habia
sido Ibaraki. Los ojos celestes de la criatura se cruzaron con los de la
chica por un segundo, todos pensaron que habia ocurrido lo peor hasta
que vieron que tan solo por un segundo de rapidez, el ataque que habria
dado directo en el vientre de la chica, habia sido detenido.
-Bueno, esto no se ve todos los dias.-
Dijo Ariadne mientras se levantaba del piso agarrando su hombro
ensangrentado. La mujer con una asombrosa destreza se habia parado
delante de Ibaraki un solo segundo antes de que el golpe de la criatura
de otro mundo la golpee.
La luz de la criatura se iba atenuando
dejando ver su figura. Casi dos metros de alto, largas patas y brazos
de un beige casi blanco y dos largas antenas que salian desde lo que
deberian haber sido sus cejas. La criatura no tenia forma de nada que
existiera en este mundo, y todo en ella, desde su anatomia hasta sus
terribles ojos hostiles, parecian no estar diseñados para existir en ese
plano.
-Que...es eso? Eso no es lo que...No es lo que la jefa dijo...-
El segundo enmascarado retrocedio, se podia ver el panico en sus
movimientos, y la criatura de otro mundo parecia disfrutar aquella
situacion. El Liepard, aun dañado por el ataque de fuego corrio tras su
entrenador resguardandolo, pero fue tarde. La criatura se lanzo sobre la
criatura oscura aplastandola con una elegante patada. El Liepard dio un
profundo ahullido de dolor mientras su entrenador intentaba regresarlo a
su Pokebola, presa del panico.
El
Onix esta cortando la ruta. Ok eso no va a ayudarnos mucho a que no nos
denuncien con la policia, pero...momento, por que es que no recurrimos a
la policia cuando intentaron matarnos? El chico Western se puso a
hablar con la muchachada antes que del colectivo vea como puede llamar
al 811 y sacarnos de ensima sin tener que atropellar a una pila de
rocas.
-Bueno no...estuve haciendo tanto, despues de todo. - Dijo el tipo mientras su capa ondeaba con el viento. Tenia puesto un ventilador en algun lado?- Me
entere que mi padre y algunos ex guardadores estaban organizandose y
trabajando con la policia internacional para evitar un incidente como el
de Lumiose de hace dos años...pero en cuanto escuche que mi padre
estaba involucrado, busque hacer lo mismo pero..por mi cuenta. Y en
cuanto a la chica...esta en un lugar seguro, creo que...si, lo ideal
seria que la vean tambien y ver si podemos sacar alguna conclusion, pero
para eso necesitariamos llegar a...
El autobus que paro
delante del Onix tenia un cartel gigante y con luces que decia
"UNDELLA", tambien se podian escuchar los gritos y vitores de gente
adentro. Esto me daba mala espina...
-Hey! Pueden correr esa cosa horrenda del camino? No ven que tenemos que llegar a Undella!
- Una porrista se habia bajado del autobus, agitando enojada sus
pompones en direccion al Pokemon de Kileo. Preferia ser atacado por
todos los Durant de Unova y no ser increpado por una porrista de...ah,
conocia ese uniforme. Virbank HighSchool. Un escalofrio recorrio mi
cuerpo...
-Ah ese uniforme no te trae recuerdos?-
Cerre
los ojos con fuerza, reprimi todo...todo lo que me rodeaba. Llevaba
tiempo haciendolo. A veces costaba mas, otras menos, pero mientras
pudiera concentrarme y apagar esa...voz, podia dejar de sentir eso y los
escalofrios que venian tambien con ella.
-Algo le pasa al colorado.- Dijo Jaime Western. Debi haber cerrado demasiado los ojos, estaban mirandome.-
-Cerebro congelado.- Respondi rapido, tratando de que nadie haga preguntas.- Emh...perdon, pero podria hablar con tu maestro?
- Le dije a la porrista, que puso los ojos en blanco, masco su chicle y
se volvio al interior del autobus. De ahi salio un hombre muy, pero muy
bajo. Y muy, pero muy peludo. Y muy, pero muy malhumorado.
-Con un demonio, tenias que ser vos- Dijo el Señor Lewis bajandose del autobus. No habia cambiado nada, salvo que parecia mas malhumorado.
-Que gusto encontrarlo en la ruta, Señor Lewis! - Ah, matenme,.
Un
chirrido insoportable. Tuve que tapar mis oidos, no podia casi
mantenerme conciente cuando esa luz exploto y esos relampagos salieron
en todas direcciones. Me habian visto, pero eso era lo de menos. El
Skarmory salio al vuelo y se detuvo a solo unos metros de su
entrenadora, esa mujer del velo. Quizas el Pokemon bajo porque pensaba
que estaba en peligro con esa cosa que habia aparecido.
-Que? Eso no es...-
Dijo la mujer del velo acercandose al Skarmory. Puso su mano sobre el
ave metalica, pero curiosamente, se puso delante como si la estuviera
protegiendo de la criatura de electricidad.
Epiphone y Nitta
estaban aun ahi, encadenadas las dos. La mujer del velo no se veia tan
confiada como hace un segundo, de hecho se la empezaba a ver algo
nerviosa...si tan solo pudiera seguir su ritmo, pero con aquella
interferencia del portal me era imposible. Nitta miro en direccion hacia
donde estaba, me habia visto, no tenia duda de eso. Dada la situacion,
creo que no tenia sentido seguir escondido ahi...
Agarre la
GreatBall con fuerza. Lleve meses intentando atrapar otro Pokemon para
no depender tanto de Gregory. Yan se me habria reido mucho si le contaba
lo mucho que me costo, estar horas metido entre hierba. Cerre los ojos y
salte al mismo tiempo que tiraba la Greatball al aire y se abria en mis
manos. El Pokemon volador agarro mis manos con sus garras y me hizo
volar lentamente para caer de forma mas suave en el piso. El ave era
pequeña, pero por suerte podia sostenerme unos segundos.
-Las Fans esperan-tot. Autografos-tot- El Chatot habia pasado demasiado tiempo con Dorothy como para aprender sus malas costumbres- Letras mas simples-tot!
Baje
a pocos metros del Skarmory, entre Nitta y Epiphone. La segunda casi se
infarta al verme, Nitta me habia visto y creo que ambos nos sentimos
aliviados de vernos. En cuanto a la criatura del vortice...estaba
saliendo del anillo de luz. Sus patas como cables ahora pisaban el piso
del galpon quebrandolo. La luz electrica exploto y quedamos a oscuras
rodeados de chispas, mientras la unica fuente de luz era ese ser.
-Supongo que vamos a tener que ponernos al corriente despues, no? -
-La estilista espera-tot! -
-El es Wayne, disculpenlo, a veces no sabe callarse.
La
mujer del velo se habia subido a su Pokemon, pero aun no habia
abandonado el lugar como el resto de sus compañeros, que huyeron
aterrorizados. Nitta miro a la mujer, algo le habia salido mal y ella lo
habia notado. Era tarde para reaccionar asi, porque la criatura salida
del vortice lanzo una descarga electrica contra la puerta del galpon,
fundiendo el metal al instante. Quizas eso fue una advertencia,
estabamos atrapados ahi.
Mientras
me acercaba a la ruta, me fui poniendo los guantes, el calce era
sorprendentemente natural. Maxwell me dijo que podíamos encargarnos
entre todos del daño de la van, la verdad me alivió un poco, aunque
sentía que era mi responsabilidad.
Jaime nos contó un poco (muy
poco) de lo que había hecho en este tiempo, iba a tener que sacarle más
información que Nadia me iba a pedir, hasta a mí me daba bastante
curiosidad. Después de mencionar a la chica, Kileo me preguntó por la
mordida... y después por el tatuaje. Ah, tendría que suponer que a él le
interesaría un dibujo así.
-Todo lo contrario.- respondí ocultando mi incomodidad. Le mostré el brazo ya que estaba, gracias a los poderes del doc no quedaba ni marca. -Es... Digamos que tuve una época bastante.. alocada.- me forcé a sonreír, pasando una mano por el cuello. -Mi mejor amiga en la universidad hacía tatuajes y bueno... ésta fue una fiesta de la que no me acuerdo nada.- Pero
ella sí, nunca tomaba cuando tatuaba. Era una de las pocas cosas en las
que todavía me molestaba pensar. Alan tuvo la idea, y claro, podía
convencerme de hacer cualquier estupidez; pero Ceci lo efectuó en el
acto. Sentí la pulsera tomar temperatura y sacudí un poco la cabeza. -Hace
años que me lo estoy intentando sacar de a poco... Si se entera que
toqué uno de sus diseños me cortaría la pierna directamente.- me reí. -Le
está yendo bien hoy en día, por lo que escuché. Queseyo, capaz tendría
que ir a pedirle que me lo cubra con otro, seguro sale más barato.- me encogí de hombros.
Volví
a sentir ese leve mareo y me tuve que refregar los párpados, realmente
teníamos que ponernos a la sombra a esta hora. Cuando volví a levantar
la vista, el autobús ya había frenado y Cameron se adelantó a hablar.
Llamarlo "conveniente" fue poco, aunque
noté más la incomodidad que el chico no estaba disimulando muy bien,
sobre todo el modo en que se encogió cuando la mujer le habló. Eso no
era bueno, y encima con la sensación que me daba ahora que le estaba
prestando atención, un leve frío como si estuviera afiebrado, no me
extrañaba del todo que se estuviera esforzando tanto en ignorarla. Por
alguna razón me costaba verla claramente.
-Escuchaste lo que dijo?- pegunté a Carlos por lo bajo. Él negó con la cabeza. Kurius.
Resultó
que el profesor que los acompañaba lo conocía, aunque no en los mejores
términos. No tendría que estar sospechando de todo, eran solo
adolescentes. Adolescentes alborotados y todo lo que eso conlleva, pero
no era algo por lo que preocuparme ahora.
No habría tenido la
mejor experiencia en secundaria, pero entre mis ilusiones y la actitud
de Ceci era muy raro que alguien se animara a molestarnos. A simple
vista hubiéramos parecido presa fácil con lo.. emo que éramos. Doue, todavía me daban vergüenza las fotos que mis viejos guardaban de esos años. Tampoco
me encantaba la idea de estar en un colectivo lleno de Kevins, antes
del accidente que lo hizo perder la beca; y en otro momento me hubiera
dado pánico, ahora al menos sabía que había cambiado. Eso es lo bueno
volver y enfrentar lo que pasó, ciertas cosas ya no me perseguían..
Tanto.
Me acerqué al hombre. -Buenas, disculpe, veo que se conocen ya.- dije en el modo más casual que pude.
-Tuvimos unos problemas con nuestra van, estoy seguro que también
habrán sentido los baches que hay en esta ruta. Sería mucha molestia que
nos ayuden a llegar a Undella? Justo vamos para ese lado.-
//Carisma + Empatía o Subterfugio// [dice]0[/dice]
Miré a Cameron disimuladamente. -Seguro que estás bien?- murmuré.
En
un ataque combinado con de todos nosotros habíamos logrado debilitar a
la criatura blanca y negra que resultaba ser la más amenazante de todas,
ahora solo nos quedaba terminar con el gato gigante que también podía
llegar a ser una amenaza a todos nosotros. Ariadne parecía lista para
atacar con su criatura cuando el suelo comenzó a temblar fuertemente,
seguido de eso una luz azul comenzaba a salir de anillo metálico. –No, no puede ser.- dije
al reconocer ese distintivo color, creo que nadie que estuvo ese dia en
la ciudad se olvidaría de eso jamás. El enmascarado se alegró mientras
decía algo sobre un laberinto, de verdad esta manga de inútiles no
sabían en lo que se estaban metiendo, los colores de las luces
comenzaron a cambiar a otros tonos distintos que jamás habíamos visto
hasta que llegaron a ser de un color casi blanco. –Todos, estén preparados.- Dije mientras respiraba hondo listo para desgraciadamente ver a la criatura de tentáculos que casi nos mata.
Lo
siguiente ocurrió en una velocidad impropia, un ser envuelto en luz
salió del portal y se lanzó contra Ibaraki en un golpe que amenazaba su
vida, antes de que alguno de nosotros pudiera reaccionar la mujer del
tapado había logrado atajarlo. -Bueno, esto no se ve todos los dias.-
Dijo tomando su hombro lleno de sangre. La luz que envolvía al ser
comenzó a apagarse revelando algo que me sorprendió mucho y para mal. No
era la medusa rara que habíamos visto años atrás, era un ser insectoide
con forma femenina, definitivamente no pertenecía a este mundo pero
tampoco al de la otra criatura, una nueva UB como las había llamado
Kileo. –No, claro que esto no se ve todos los días pero te aseguro que
es algo que tenemos que deshacernos cuanto antes.
-Que...es eso?
Eso no es lo que...No es lo que la jefa dijo...- comentó asustado uno de
los enmascarados, pocas veces tuve TANTAS ganas de romperle la cara a
alguien pero fuertemente.
La criatura se arrojó casi disfrutando
contra el pokemon felino golpeándolo con una de sus piernas casi
produciéndole un daño atroz, distinta forma pero mismos instintos
asesinos. –A ver manga de estúpidos, no sé qué
carajo les dijo la pelotudo de su jefa, pero nada bueno salió de ese
laberinto hace dos años y nada bueno va a salir ahora.- exclame
enojado, de verdad los arrojaría yo mismo a ese portal si no fuera
porque estamos en peligro de muerte y quizás los necesitemos para que
nos ayuden. Esto solo complicaba más las cosas, teníamos que detener a
esta criatura antes de que salgan más y comiencen una masacre como la de
Lumiose. Desgraciadamente el rescate de las chicas iba a tener que
esperar, de verdad hoy yo mismo arrojo a alguien de esta secta del orto a
un portal.
-Bueno señores, creo que ya
saben lo que tenemos que hacer, estas cosas atacan a matar y no tienen
un solo gramo de culpa o remordimiento, no sientan lastima por ellas y
vamos a tratar de sobrevivir. – Comente a todos los presentes que
pudieran escucharme, estábamos en peligro y solo podíamos tratar de
mitigar el daño que esta cosa causara en este mundo. – Vamos a tratar de
devolverla al agujero del que vino, ustedes idiotas cierren el portal o
les juro que van a caer por ahí, esta cosa debe tener amigos iguales y
creeme que no es nada divertido cuando comienza a aparecer más y más
criaturas, así que pone la emoción de pelotudo que tenias hace 5 minutos
y úsala para apagar esto, ya.-
Dicho eso tome la pokeball de
diana y la arroje al aire, el ave surgió de la luz blanca envuelta en
cenizas rojas, no estaba seguro de si los tipos de aplicaban a estas
cosas pero esa cosa parece un bicho y que mejor que un pájaro para
acabar con uno. –Di, hora de pelear, Aerial Ace!- Ordene con firmeza,
claro que estaba asustado como todos pero no podía hacer nada más en
estos momentos más que intentar debilitarla. –Hay que mandar a Beauty al
lugar del que vino.- /skill shadow/ [dice]0[/dice] /Aerial Ace 20 (+10) + 20/ [dice]1[/dice]
Todo iba peor ya no se puede hacer nada el aparato funciona y el piso se desmorona, el vortex crece.
Los
enmascarados repondieron parcialmente lo que pregunte diciendo que ya
habiamos visto el laberinto en Luminose y me acorde de los portales que
rasgaban el cielo aquella noche ellos querian invocar a esas medusa.
Una
figura de luz empezo a reverla en el portal era diferente a la de la
otra vez era otra criatura esta tenia una forma humanoide pero tenia
patrones y rasgos como los de un insecto y sobre todo una belleza no
proveniente de este mundo.
Los enmascarados se pusieron nerviosos parece que invocar a esta criatura no era su objetivo.
La
criatura comprendio el nerviosismo y sin que pudieramos pestañar
derribo a uno de los pokemon de los atacantes con placer en sus ojos.
Pero
la criatura no se detuvo ahi esta fue derecho contra Iba pero el
pokemon de Ariadne pudo interceptarla antes de que acabara con Iba, fui
rapido con ella. -Iba esta bien?. No se por que nos atacas pero no te perdono que la ataques. Mina wind attack-
–Todos, estén preparados.-
Gritó Nicholas, hasta yo me habia dado cuenta, las bestias de Lumiose,
ibamos a pelear contra eso de nuevo, me preparé a que apareciera una de
esas cosas de nuevo, respiraba con dificultad.
-Mavis...- Le hice señas a la Kirlia para que volviera pero lo que vi despues me dejó sin aliento. Iba a morir.
Quedé
ahí, arrodillada, lágrimas corriendo por mis mejillas, estaba aterrada,
como nunca en mi vida, esa cosa... iba a matarme... solo porque
podia... no era un depredador cazando, no era una presa defendiendose,
solo queria matar... y yo estaba en frente.
No se cuanto tiempo
quedé ahí, no podia pensar, no podia reaccionar, solo pude ver como algo
pasaba frente a mi y fue golpeado por esa bestia, y verla saltar para
atacar de forma brutal al pokemon de los enmascarados. Violencia pura
solo para matar sin razón.
La voz de Mint me hizo volver en mi
misma, no vi cuando se puso a mi lado e hizo que Mina contra atacara.
Luego Mavis se puso frente a mi y extendió sus brazos, un leve brillo
saliendo de sus manos.
/Heal Pulse/ [dice]0[/dice]
-Mavis...-
Podia respirar con más facilidad ahora, no sabia si era porque me habia
curado del efecto de mis habilidades durante la pelea o ese monstruo se
habia alejado pero solo podia pensar en una cosa -REGRESA!- Grité tomando su pokeball, la que veia más grande de lo normal en mi mano. -Kiran!- Apunté al Growlithe con su pokeball pero esquivó el rayo rojo. -Tenemos que correr, esa... cosa es...- El Growlithe me interrumpió de un ladrido y se dió vuelta, su pelaje erizado y gruniendo sonoramente.
Dios,
como me costo seguir los... veinte segundos? En los que Jaime explico
lo que estuvo haciendo estos años y por que se había crecido la barba.
Bueno, eso ultimo no, creo. Tampoco explico por que esta haciendo
cosplay de su novia muerta, aunque siento que seria algo incomodo
preguntarle eso. Aunque... ¿Julia no tenia barba, no? Se hubiera visto
cool con una, aunque...
Ah, mierda, me perdí la explicación.
Bueno, seguro era algo de guardadores y sus daddy issues y que se yo.
Después le pregunto a los demás. Como todas esas veces que les pedía los
apuntes después de clase a mis compañeros de la secundaria porque no
podía prestar atención en clase. Muy raramente me los daban, pero bueno.
-Y hablando de la secundaria... -Susurre para mi mismo mientras guardaba a mis Pokemon restantes y me acercaba a la ruta. -¿Dia de coincidencias?
Cameron
se había acercado al colectivo; al parecer estaba lleno de estudiantes y
el profesor adentro parecía conocerlo. Tan solo la vista de esas
docenas de adolescentes a través de las ventanas del vehículo me produjo
un rechazo inmediato, por mas que solía estar rodeado de ellos en
Lumiose. Debe ser por que es un colectivo de secundaria. Que años de
mierda; todas las charlas, los terapistas, los amigos falsos... eugh.
Dale, tenes que mantener la caripela, me recordé a mi mismo.
Me
acerque al grupo; Yannick parecía estar presentándose, diciéndole al
hombre quienes eramos y si podían llevarnos hacia donde teníamos que ir.
También parece que se había cambiado de atuendo; esos guantes le
quedaban piola y... mamita, esas gambas. Aunque... momento, eso en su
muslo izquierdo...
No se si disimule bien la pequeña carcajada
que deje salir, pero trate de disfrazarla como tos. Al acercarme a su
lado, escuche que había terminado su pedido y, susurrando, dije:
-Tenia razón ella entonces, ¿Huh?
Luego de aquel comentario (y de darle un codazo cariñoso en el brazo), le mostre la misma sonrisa al hombre y agregue:
-Parece que tienen un grupo bastante ruidoso ahí. -Le dije, formando una de mis encantadoras sonrisas. -
Yo soy un artista callejero; capaz puedo entretenerlos un rato hasta que
lleguemos a Undella. Mi especialidad es volar y tirarme de torres muy
altas, pero seguro puedo pensar en algo mas para hacer.
Escuche
por arriba lo que decía Yan acerca de su tatuaje y no pude evitar
sonreir, quien no ha tomado un decisión tonta, pero que se hace una
anécdota graciosa con los años levante la mano.
Y mientras Jaime
nos contaba un poco de porqué hacía lo que hacía, un autobús frenó
frente a l onix de Kileo. Del que bajó un profesor que parecía conocer a
Cameron, seguramente era su secundaria de origen, quizá logren
llevarnos y hablábamos con coherencia.
Me voltee a mirar a Nico
mientras pensaba esto que ya estaba usando sus dotes “nicales” que ya
parecían haber captado la atención de todos a bordo en especial a
algunos chicos y chicas que le hacían ojitos.
-¿Sr. Lewis o
debería decir Profesor Lewis? Dr Goodman, una placer.- le dije
extendiendole la mano y enseñándole mi matrícula profesional, que por
supuesto estaba dada de baja, la vida del viajero no me permite pagar la
matrícula- Como dijo mi compañero tuvimos un accidente, parece que los
pokemon de la zona están atacando a los transeúntes de la ruta y seria
de gran ayuda que nos alcanzaran hasta el pueblo vecino. Quizas
podriamos serles de ayuda si algun problema de presentase.
Demasiada
luz. Tuve que cerrar los ojos, cubrírmelos con los brazos para evitar
que me doliera. Entre todo el ajetreo pude escuchar a Reenira murmurar.
Algo le estaba afectando. Era una de las pocas, por no decir únicas,
veces que notaba que algo en ella se había quebrado... Sucedía
especialmente cuando las cosas no sucedían como deseaba. ¿Pero qué era
lo que quería realmente? El skarmory a su lado, Epiphone parecía
espantada, y en el medio del caos, entre las cosas que sentía de manera
intermitente, sentí una corriente particular. No era humana, era
pokémon, de eso estaba segura. Eran más difíciles de descifrar, pero
tenían una esencia particular. Levanté la mirada abriendo un poco uno de
mis ojos y llegué a distinguir una figura descendiendo cerca nuestro.
Di un paso atrás, temiendo que fuera otro enemigo, pero la voz
acompañada de una brisa casi musical fue, a pesar de que no lo conociera
tanto, inconfundible. -¿Ian? -pregunté ligeramente sorprendida. O
sea, lo había percibido antes, pero posiblemente era una de las últimas
personas que esperaba encontrar allí. Su aspecto le daba un aspecto más
bien seguro, y se notaba que había estado recientemente en alguna playa o
algo. Pero eso no importaba ahora. El chatot no dejaba de hablar aunque
todo lo que dijera no tuviera relación alguna con lo que sucedía.
Bueno, que pudieran imitar la voz humana no los volvía inteligentes- Sí,
pero hablando de ponerse al corriente... -mi mirada se movió a un lado,
a la criatura. Su cuerpo se iluminó a la par que todas las luces del
sitio. Varias explosiones se dieron al mismo tiempo, y pequeños
fragmentos de cristales provenientes de los faroles cayeron a nuestro
alrededor.
Ahora estábamos a oscuras, iluminados únicamente por la luz proveniente de aquella criatura.
Clack.
En
un instante, otras luces surgieron desde mi bolso y salieron disparadas
todas hacia mi. Entre el espanto por la confusión y el intento de
sostener el peso abrupto sobre mis hombros, casi caigo al suelo. Ah,
al irse la energía el sistema que los mantendría encerrados debería
haber dejado de funcionar. Kyria estaba sobre mi hombro con las alas
extendidas. Omolon entre mis piernas, mirando desafiante a la cosa de
cables. Lulu flotaba detrás de la pata, con sus cabellos extendidos y
ondulantes, atenta. Urien también había salido a pesar de la
prohibición... Y obviamente, Galahad flotaba delante de mi pecho sin
emitir ruido alguno. Era de esperarse. -No, esto es un peligro.
Kyria, Urien, dentro -ambos me miraron y se miraron entre sí antes de
volver a sus pokebolas. Aquella cosa despedía electricidad y rayos por
todos lados, dejar a Kyria participar era un homicidio. Y lo mismo
era... -Galahad. Tu también -el se volteó lentamente a mirarme
totalmente ofendido. Le sostuve la mirada, la cual por más que intentara
ser firme, denotaba preocupación. Y creo que por eso ingresó sin decir
más nada- Omolon, ayúdame. Lulu -la fantasma asintió- Cuida de Epiphone.
No le tengas miedo -le dije a la chica mientras la fantasma se le ponía
a un lado, sus cabellos agitándose con violencia- Es posible que te de
un poco cuando ataque pero... tranquila, que ría como maniática no
significa que... bueno, no importa.
Observé una vez más a nuestro
alrededor. Debíamos escapar, si esa cosa se parecía a las medusas de
Lumiose... no sabía si podríamos hacerle frente. Pero con la puerta
fundida... -No tengo idea de cuáles eran tus planes Reenira -dije
observando a la mujer- Pero sinceramente, si bien quiero que te vayas
con vida de aquí, yo también quiero hacerlo ¡Hay que devolver esa cosa
al lugar del que vino! ¡Omolon, evitemos que avance!
La pequeña
hormiga comenzó a gritar mientras el aire se agitaba a nuestro
alrededor. Costaba, mi pulsera brillaba en medio de la oscuridad y noté
la mirada de Lulu sobre ella. No debo, no debo... Es solo por ahora, para escapar. Puedo... tener control de esto. Puedo.
Tengo que regresar.
El
aire se atormentó a nuestro alrededor por un pequeño instante. Esperaba
fuera lo suficiente para impulsar el torbellino de tierra que se
formaba delante nuestro y avanzaba con velocidad hacia nuestro,
seguramente, enemigo.
//Sand Tomb 10 (+10 STAB) (+40 x Heavy Storm si funca) + 5x1d5// “1d5” Modificador de daño y cuánto turnos queda atrapado (1-2, 3-4, 5-6, 7-8, 9-10): [dice]0[/dice]
Multiplicador de daño del modificador (o sea los dados en ataque de Trapinch):
-
Yo con gusto te haría un diseño personalizado, si pensás en taparlo con
otro y si tu amiga me permite colaborar.- le dije a Yannick en respuesta
a la historia del tatuaje.- No se… Podría ser algo más… musical.-
terminé guiñándole en complicidad.
El micro (que era claramente
universitario) se fue deteniendo lentamente frente a Rancor. ¿Cosa
horrenda? ¿MI pequeño Rancor? Claramente no es buen gusto lo que
aprenden en ese instituto si no saben reconocer un espécimen de Onix tan
bello como mi compañero. Igualmente iba a guardarme esa opinión ya que
dependíamos de su buena voluntad. Guarde a la serpiente de roca al ver
que bajó la que parecía la persona a cargo (si es que había alguien
debajo de todo ese pelo). Cameron, Maxwell y Nico se acercaron a hablar
con el sujeto. No dudaba del poder convencimiento de Nico, pero ya
estaba listo para sacar mi placa si sus dotes no eran suficientes.
Odiaba tener que usarla y siempre es mi último recurso. Siendo detective
encubierto, no es de lo más conveniente andar mostrando certificados de
que uno es de la Policía Internacional. Me fui acercando al vehículo y
ya podía presentir que íbamos a volver estar en viaje a Undella pronto.
Decidí sumarme a la conversación ya que había algo de lo que teníamos
que encargarnos.
-¡Mi buen señor!- dije estrechándole la mano si
darle oportunidad de reaccionar.- Kileo Meiola. Pintor, aventurero,
trotamundos, experto en arte, etc. Un gusto. Antes que nada, permítame
disculparme por interponer mi Onix en su camino. No podíamos permitirnos
dejar pasar la oportunidad de su tan bien preparado vehículo. Pero,
como bien dijo mi compañero, estamos en apuros. Solo mire cómo quedó
nuestra van.- extendí mi brazo hacia Celeris que yacía en la banquina.
-Y la peor parte es que ni siquiera es nuestra. Una amiga nuestra nos la
prestó para poder llegar a nuestro destino y se pondría muy mal si la
dejamos abandonada en el costado de esta ruta perdida. Su micro es
claramente una maquina potente y podría remolcar hasta Undella a nuestra
pobre camioneta.- Puse todo el dramatismo que pude en cada una de mis
palabras. -Veo que van a algún tipo de partido y en agradecimiento me
ofrezco en ayudarles a pintar banderas y carteles de lo más vistosos. De
hecho tengo un Heatmor que es un experto fabricante de banderines.-
terminé alzando la voz para ver si podía ganarme los favores de los
adolescentes sobre el autobús.
//Carisma + Persuasión, para que nos remolquen la van//