No
era fácil mantener la máscara de supuesta valentía que llevaba puesta.
Con cada segundo que no estaba quieto, con cada momento que pasaba sin
que declarara un ataque o hiciera... algo, se evaporaba lentamente.
Nunca me había costado tanto mantenerme a mí mismo, especialmente cuando
más lo necesitaba.
Capaz que me hacía falta un recordatorio.
Sin
pensarlo apreté el botón de una de mis Pokebolas restantes, y de su luz
apareció Lup, chillando orgullosamente mientras inflaba su pecho y le
sonreía a nuestros enemigos. No pude evitar imitarla en eso último.
-Perdoname Taako, pero para ésto hay que trabajar juntos. -Le dije, encogiéndome de hombros. -Y Lup... acá hay que darle todo lo que tenemos, ¿Sí?
Mi primer Pokemon me miró de una forma que dió a entender que le costaba creer lo que acababa de escuchar.
-Tenés razón, acabo de decir algo bastante estúpido. -Me reí de mí mismo, cada carcajada deshaciendo el nudo que tenía en el estómago un poco más. -Vos siempre le dás más que el cien porciento. -Dicho eso levanté la mirada hacia la mujer atacándonos, y respiré hondamente antes de hablar. -
¿¡Te pensás que nos vas a intimidar después de lo que nos hizo Isaac!? Y
después de que Julia dejó todo eso detrás... me parece que sos vos la
que se va a terminar acá. Danos todo lo que tenés si te animás.
Dicho eso apunté hacia el Pokemon calamar gigante, y Lup ni siquiera necesitó mi instrucción para atacar.
Para
cuando me di cuenta la señorita Ibaraki había detenido mi caída y ahora
estaba llorando, pobre niña, si ver tanta violencia era terrible para
mi, para ella no me imagino como debería ser.
Me levanté como pude, el pecho me dolia intensamente, las pociones habían hecho su trabajo.
“Es medicina que solo nosotros podemos hacer, pero no es magia, que te quede claro”
La
herida aun abierta recorría todo mi pecho y mientras veía mi camisa
favorita ahora hecha harapos, no pude evitar recordar esas palabras. La
cicatriz iba a quedar no podía hacer nada para evitarlo.
-No se
preocupe por mi señorita, déjeme ver sus heridas- le dije mientras
intentaba sanarla y antes de que la joven le diera una orden furiosa a
su pokemon.
//Cure minor wound// [dice]0[/dice]
Me costó horrores ponerme de pie y Cian ya estaba listo para otro ataque.
-Vamos Cian, dale con esas espinas al calamar!
//Pin Missile 10(10)+5x10// [dice]1[/dice]
//Espinas 1-2 son 1, 2-3 son 2 Etc// [dice]2[/dice] -------------------------------------------- El ataque es físico, aunque parezca especial, aclaro porque a mi me sorprendió y creo que el reflect no salio.
Skorupi gana +5 de EXP Litten gana +5 de EXP Gourgeist gana +5 de EXP Emolga gana +5 de EXP Minior gana +5 de EXP Heatmor gana +5 EXP Sanygast gana +5 EXP Zubat gana +5 EXP
Sandygast tiene +1 a DEF Minior tiene +1 a DEF Emolga tiene +1 SP DEF
Honedge sin HP Budew sin HP Tympole sin HP Phantump tiene 31 de daño Gourgeist tiene 23 de daño Minior tiene 5 de daño Sandygast tiene 7 de daño Heatmor tiene 42 de daño Ibaraki tiene 6 heridas Yannick tiene 10 heridas Nico tiene 14 heridas Nicholas tiene 11 heridas Mint tiene 12 heridas Maxwell tiene 6 heridas
El
callejon retumbo con los ensordecedores ataques. El piso se quebro un
poco luego del impacto simultaneo y eso hizo que la mujer del tapado
tenga que dar unos pasos hacia atras. Los dos Inkays cayeron primero, si
bien la barrera de luz que habian creado seguia en pie, no fue
suficiente para evitar que las criaturas caigan. El Malamar fuertemente
debilitado por el ataque de hojas lanzado por el Gourgeist de Yannick
fue embestido con fuerza por el Minior de Nitta, dejandolo indefenso
ante otro ataque. El Skorupi de Maxwell lanzo una lluvia de espinas que
impactaron directamente contra el Pokemon oscuro, haciendo que este
quede estampado contra una de las paredes del callejo, inconciente.
Siva, la Guardadora, regreso a su Pokemon a la UltraBall indiferente.
-Isaac no los traiciono, el también terminó entendiendo lo que Julia había descubierto podía ser verdad.-
Nicholas hablo con decisión por ensima del ruido de las patrullas. Siva
lo miro indiferente con sus ojos grises entrecerrados. Una sonrisa se
dibujo en su rostro.
-Pero, querido mio...Yo no pongo en duda que lo que Julia descubrio sea real. -
Respondio Siva con una enigmatica sonrisa mientras de su tapado sacaba
una ultima UltraBall. La esfera se abrio y de ella salio una criatura
violeta con tenezas en sus patas y cola. El Drapion era mas del doble de
grande que su entrenadora, la mujer se subio en su lomo de forma
elegante y despreocupada y suzurro unas palabras.
Ocurrio tan
rapido que no tuvieron tiempo de reaccionar. Samuel previo lo que estaba
por ocurrir y rapidamente libero a su segundo Vivillion, las dos
criaturas voladoras rapidamente levantaron en los aires al lider de
Gimnasio y a los niños del Ralts antes de que el impacto de la tenaza
del Pokemon oscuro choque contra el piso, generando el fuerte sismo que
ahora movia el piso y quebraba el pavimento.
//Earthquake 40 + 40 // [dice]0[/dice]
Samuel
puso a salvo a los niños, una vez que el terremoto paso y el piso dejo
de moverse, el Lider regreso a suelo firme, seguia bastante herido pero
luego de tomar la pocion de Maxwell parecia respirar con menos
dificultad.
-Todos, si tienen algun Pokemon al cual puedan subirse, ahora es el momento.-
Dijo mientras uno de sus Vivillion se posaba en su espalda para
levantarlo en el aire. Siva sonrio lentamente mientras veia el destrozo
causado por el ataque de su Drapion.
-Neron
tampoco pone en duda los descubrimientos de su amiga Julia...es una
persona poderosa, y para nada tonto. Dicen que su hijo no heredo nada de
lo que hace grande a su padre...no es de extrañar que lo quiera muerto.
Pero de momento, lo necesita. A quienes no necesita es a ustedes
metiendose en el medio. Y yo...Kabir...Isaac...a su modo, son triadores a
nuestra orden. Pero Akshara tambien lo es, ella rebelo nuestra sociedad
a Neron, ellos a su hijo. Esto es una guerdadora encargada de registrar
estos conflictos. Y siempre que estos conflictos terminan, hay un
ganador. Y se lo suficiente sobre guerras para saber que Neron esta del
bando victorioso.
Maxwell
estaba de pie, eso era bueno, aunque estaba mal herido hizo algo
extremadamente tonto, habia usado su habilidad para curar mis heridas de
nuevo, a pesar de era él el que estaba más herido. Acercó su mano a mi
rostro, a la zona afectada por las marcas de sangre, podia sentir el
calor de su mano aliviando el dolor, pero... -Por qué...-
La
mujer esta no se rendia, habia arrojado una pokeball más al aire,
dejando salir una bestia descomunal, se parecia algo a Cianuro el
Skorupi, pero mucho más grande y aterrador, el enorme pokemon dio un
gran golpe al suelo, produciendo un temblor.
Por algun milagro,
el golpe nunca llegó, el temblor no habia sido tan fuerte como habiamos
esperado, pero eso al parecer no detubo a la mujer que ahora se habia
identificado como Guardadora -... Y se lo suficiente sobre guerras para saber que Neron esta del bando victorioso.-
Increible,
desde que habia salido de viaje en ese autobus hace unos días, habia
conocido de todo, tal vez más de lo que habia visto en mi vida, gente de
toda clase, mis nuevos compañeros de viaje, sus respectivos compañeros,
el viejo borracho del sombrero y su banda, lideres de gymnacio, una
organización rara que hacia cosas a escondidas del mundo, no tenia mucho
de que arrepentirme, no más de lo normal realmente, errores que habia
cometido, pero convivir con los errores ya era normal, tan normal como
la tipa esta, una cobarde.
-Entonces... No estás... Peleando porque quieras... Estas peleando... Estas peleando por miedo-Hablaba con dificultad, sentia mi corazón palpitando de forma salvaje. -Le
tenes más miedo a Neron... Que a nosotros... O a tus compañeros...
Conocí a muchos como vos... Cobardes que se escondian... Atras de
alguien más fuerte- Continué, recordando algunos momentos en el
Lost Hotel, matones que solo eran valientes si peleaban con alguien más
debiles que ellos, y nunca uno contra uno, por supuesto.
Di unos
pasos al frente, acercandome a Baraddur, quien seguia firme preparado
para pelear, a pesar de no haber podido ayudar contra los anteriores. El
Sandygast me hizo una señal, luego formó un escalón con su cuerpo, una
zona aplanada suficiente para subir a su espalda, al subir parte de la
arena del sandygast envolvió mis botas, dandome mayor firmeza. Hacia
tiempo que no haciamos esto, desde que habia crecido mucho como para que
soportara mi peso por mucho tiempo.
-Decime...
Qué sabes sobre pelear... para proteger a un amigo...? a un hermano...?
Qué sabes sobre estar sola... en un bosque... viendo a tu unica familia
pelear por vos...- Hablaba llevando mi mano a mi espalda inconcientemente, recordando uno de los peores momentos de mi vida -Deseando ser más fuerte... para que no tenga que sufrir por vos...-
De nuevo, sentia ese ardor, esta vez quemando mi pecho, comencé a toser
y sentir sabor a sangre, pero no le di importancia, no era nada
comparado con aquella vez, cuando casi pierdo a mi compañero.
El
nuevo Pokemon que sacó la mina se veía mucho más peligroso que todos
los anteriores combinados, lo cual no me dió demasiada confianza. Vi
como levantaba ambas manos, preparando su ataque, y supe que no había
forma de que mis Pokemon pudieran resistir eso.
Tanto Taako como
Lup voltearon sus cabezas para mirarme cuando levanté sus Pokebolas, y
apenas tuvieron tiempo de protestar antes de que desaparecieran dentro
de éstas. La decepción y furia en sus ojos fue algo que me hubiera
gustado ignorar. Por suerte estaba muy ocupado con el terror de lo que
podría haber pasado.
Vi de reojo como el Pokemon de Ibaraki atacó
con todo lo que tenía, y eso sí tenía que evitarlo si no quería morir.
Miré hacia arriba, donde el Unown flotaba mirándome, y levanté una mano
hacia él. No necesité palabras para expresar lo que quería que hiciera.
//
Flying Partner con el Unown, si no se puede decime que tengo que tirar.
Si alguien más quiere al Unown hagan retcon, yo me subo a lo que haya//
Cuando
vi la intencion de iba me di cuenta que se iba a poner feo. Tome a cian
de la cola y salte hacia el unown mas cercano. Y quede colgado junto a
nico.
-Venis muy seguido por aca?- le dije con una sonrisa tratando de no resbalar.
Mientras
tanto el skitty disfrutaba del paseo tanto que se puso a gritar como
quinceañera en montaña rusa en direccion del drapion y la chica.
De
verdad? Un Drapion? No tiene un tanque de guerra ya que estamos? Encima
me dice querido, por favor señora, me esta tratando de matar por lo
menos no sea tan cara dura. Punto a favor, ella también cree que julia
esta en lo cierto, aun que no por eso se esfuerza menos por matarnos,
quizás hasta mucho más que nuestro querido Isaac. El escorpión violeta
enterro sus pinzas en el suelo al mismo tiempo que Sam nos decía que nos
protegiéramos al mismo tiempo que una mariposa lo levantaba por el
aire, no alcance a reaccionar que el temblor se detuvo. Su ataque había
fallado, nunca en mi vida me sentí tan afortunado.
La mujer
siguió hablando sobre Neron, sus cualidades que los hacen grande y que
en estos momentos me importa muy poco, lo que me llamo la atención fue
el tema de Jamie, el muchacho supo todo este tiempo sobre esta sociedad y
jamás nos dijo nada, si la herida de ayer no le saco un brazo me parece
que yo lo voy a hacer, él y Epiphone están hundidos hasta el cuello y
jamás nos dijeron nada. Vamos a tener una muuuy larga charla cuando
volvamos al container.
Mis pensamientos fueron interrumpidos por
Ibaraki quien parecía estar teniendo otro de sus momentos, los raros que
generalmente terminan con un ataque potenciado, no eso en los que
alguien queda sin dientes. Subió a su pokemon mientras le gritaba a la
guardadora, el montículo de arena parecía estar brillando a la vez que
se sentía un temblor formarse. -Carajo, esto si se pone feo.-
El emolga me miro como si nada, quizás por ser un bicho volador, loque
me da una idea. Podemos safar usando nuestros pokemon voladores. Tome la
pokeball de mi Fletchling y la libere, necesitamos toda la ayuda
posible. -Diana, a volar!- Ordene mientras
levantaba la mano, la pequeña ave pareció entender enseguida mi orden
ya que me tomó con fuerza mientras aleteaba, me eleve unos centímetros
por el suelo. Mire a Roomie, hasta donde sabia sus únicos pokemons eran
la calabaza y la espada, ninguno de ellos servía en estos momentos. –Liz, ayuda a roomie!- Grite a la ardilla, esta me miro y asintió sonriendo, comenzó a correr hacia el entrenador y treparlo por la espalda. -Tomala de la cola-
indiqué al joven, si no fuera que podemos morir estaría sintiendo
vergüenza por decir eso. El emolga salto del hombre del muchacho que la
agarro justo a tiempo mientras se elevaban en el aire, desafiando
claramente las leyes de la gravedad, estoy casi seguro que en esta
ciudad abundando los esteroides.
Si mis conocimientos no me
fallan, ese ataque realmente podría hacerle daño a al drapion, mientras
que los míos no serian tan efectivos, quizás podamos ayudar un poco más
con algo de suerte. -Tail Whip!- Indique a la emolga al mismo tiempo que me concentraba en el drapion.
Ahora,
si Nerón sabe sobre la destrucción mundial inminente que descubrió
Julia, entonces eso quiere decir que planea usarla a su favor? Un
villano digno de película de Disney, como lo odio.
Las pinturas no dieron en su objetivo y Lando fallo el ataque... de nuevo... Supe que era suficiente para él el día de hoy.
-
Regresa, amigo mío. Hoy no parece ser nuestro día y no pretendo
sobreexigirte.- dije, mientras el pokémon de fuego desaparecia en un haz
de luz y volvía a la esfera bicolor en mi mano.
Pese al pobre
desempeño en batalla que tuvimos con Landito (odiaba no poder demostrar
mi espectacular potencial), el Malamar y los Inkay cayeron gracias a los
ataques de los demás. Qué vergüenza: Seguí a la chica del Minior para
ayudar y no siento que lo esté haciendo bien.
Uno de los recién
llegados tuvo un breve pero acalorado intercambio de palabras. "...lo
que Julia descubrió...". Parece que es algo importante y pareciera que
es la razón de todo este conflicto... o no, tal vez. Puede que si
tuviéramos 5 minutos para respirar tranquilos, alguno me podría explicar
qué es lo que pasa y por qué esta distinguida mujer trata de
asesinarnos. No es sea la primera vez que trataran de meterme en una
bolsa de plástico, pero la incertidumbre, la falta de información me
tortura.
Otra pokeball voló por los aires y frente a la mujer se
materializó una criatura imponente con unos brazos que no invitaban
exactamente a darle un abrazo. El Drapion abría y cerraba las pinzas de
las patas delanteras y cola, mirando a todos los lo rodeaban, expectante
de la orden de su entrenadora. Esta se subió a la criatura sin dejar de
hablar sobre guerras y cosas poco claras.
"Todos, si tienen
algun Pokemon al cual puedan subirse, ahora es el momento." grito el
líder de gimnasio y no llegué a reaccionar a hacer nada, salvo tomar mi
valija que seguía abierta. Al tomarla tan súbitamente, dejé caer la
Duskball de la pequeña letra. Cerré los ojos esperando lo peor, pero el
terremoto del rival solo fue una pequeña vibración bajo mis suelas.
Levanté el objeto caído. Iba a guardarlo cuando la chica rubia empezó a
hablar. Parecía que todo esto le había tocado algún nervio porque con
cada palabra se podía sentir como iba tomando impulso para atacar. Luego
veo que se sube a su Sandygast. No estaba acostumbrado a ver algo así,
incluso siendo que ya conocía a esta especie de criaturas, no son raras
en las playas de Alola. La gente común no suele entrenarlos o
acercárseles siquiera, mas que nada por todo el folclore que hay
alrededor de las mismas (cosa que en lo personal me parece ridículo).
La muchacha grito. La tierra comenzó a temblar otra vez pero más fuerte.
Casi
instintivamente mire mi mano derecha, en la que todavía portaba la
esfera con la pequeña vocal encerrada en su interior. No lo pensé dos
veces.
-¡Perdón perdón perdón! ¡Necesito tu ayuda!- le dije a la
criatura que recién salia de la esfera negra y verde, mientras la tomaba
por una de sus ¿patas? con la mano con la que no sostenía mi valija.
Increíblemente me levantó con cierta facilidad pero notaba en su
expresivo ojo que no la hacía gracia nada de esa situación.
-En algún momento alguien nos va a decir bien qué descubrió Julia o vamos a seguir asumiendo hasta que la encontremos?-
pregunté a nadie en particular luego de que terminara el temblor. Por
suerte no nos había alcanzado, pero me estaba cansando de que todos nos
trataran como un peligro y nos quisieran matar cuando apenas sabíamos
qué estaba pasando. Y que Jaime al parecer se había hecho el boludo todo
este tiempo con el tema de los Guardadores. No me gustaba ser quien
desconfíe de nuestro jefe pero puede que incluso se haga el pobre inútil
a propósito, si eso le permite aprovecharse de... No no, no creo que
sea como Alan. Si arrancás a pensar así no ayudás más a nadie.
Al
menos Ehre estaba dentro de su pokeball, seguramente no había escuchado
a la mujer. No sé cómo reaccionaría a la mención de que estaba por
meterse en otra "guerra"... Quién sabe, capaz habíamos hecho suficiente
progreso y lo tomaría como un desafío. Otra oportunidad.
Ibaraki
empezó a gritarle a la mujer y por un segundo pensé que el nuevo temblor
que comenzó era por ella, no me extrañaría con lo que la hemos visto
hacer. Pero al mirar bien noté que era su Sandygast.. y sí, algo que
ella estaba haciendo también, creo que se había vuelto a herir.
Realmente hay que hablar con esa chica, después.
-Tomala de la cola.- me gritó Frost mientras sentía que su ardilla trepaba hasta mi hombro.
-Tiene que haber un mejor modo de hacer ésto.- le
respondí mientras lo hacía. Increíblemente me logró levantar bastante
de suelo. Entonces Frost le ordenó que usara Tail Whip. Y el bicho me
agitó por el aire en frente al escorpión gigante, lo que pareció
alterarlo un poco. Leti miraba la escena desde el suelo, sin entender
nada. Había recibido algo de daño del ataque pero se mantenía en pie.
-Leti. Podés. Usar. Confuse. Ray. En el. Coso. Ese.- Apenas podía hablar mientras la ardilla me revoleaba. Hubiera preferido que ese temblor me mate.
A
pesar de nuestros esfuerzos esta tipa parecía no rendirse más. A pesar
de todo su discurso, debíamos admitir que no le estaba yendo tan bien.
¿Una guerra? Esperaba que no tuviéramos que llegar a eso. Al sentir
el temblor a mis pies pensé en el trapinch, pero pronto recordé que
ahora estaba dentro de mi bolso. Galahad reaccionó rápidamente y de un
empujón me hizo subirme sobre él, y se elevó alto en el aire, por encima
de los edificios. Creo que estaba más arriba que el resto del grupo que
por algún motivo también habían conseguido ponerse a respaldo. Aunque
usar a los pobres unown con sus cuerpos frágiles y pequeños no era la
mejor opción. Si pensaba que estaban haciendo uso de algún tipo de poder
psíquico quizá me tranquilizara un poco.
En eso noté algo.
-
¡No le hagas hacer eso! -le grité a Frost, que era sostenido por Diana-
¡Sus alas son pequeñas y débiles para aguantar tu peso! -por el dios de
las rocas, hacer eso era una total imprudencia de su parte aún en una
situación como esta. Lo invito a arriesgar a que sus huesos y músculos
se atrofien por sobre esfuerzo.
Drapion esta Confundido Drapion tiene -1 DEF Drapion tiene 45 de daño
Sandygast tiene +1 a DEF Minior tiene +1 a DEF Emolga tiene +1 SP DEF
Honedge sin HP Budew sin HP Tympole sin HP Gourgeist sin HP Phantump tiene 31 de daño Minior tiene 5 de daño Sandygast tiene 7 de daño Heatmor tiene 42 de daño Ibaraki tiene 11 heridas Yannick tiene 10 heridas Nico tiene 14 heridas Nicholas tiene 11 heridas Mint tiene 12 heridas Maxwell tiene 6 heridas
El
Drapion se movio muy rapido. Los entrenadores habian contraatacado una
vez que se pusieron a salvo, pero la criatura apenas sintio los ataques a
su lado, y el unico ataque que realmente pudo haberle hecho un daño
significativo, fue interceptado a la perfeccion. El Pokemon violeta vio
el suelo temblar y las paredes estremecerse, asi como a todos los
entrenadores poniendose a salvo. La criatura dio un salto en el aire y
reboto contra las paredes del callejon con una agilidad no propia de una
criatura de su magnitud. El Drapion aterrizo a escasos metros del
Pokemon de Ibaraki, entrecerrando sus ojos. Siva parecia no haberse
inmutado por la situacion aun.
-Son tan jovenes...- Dijo casi lamentandose. - ...no
se trata de pelear, se trata de sobrevivir. Estan del lado equivocado
de la historia. El joven Gautier es un idealista que esta solamente
buscando a su amada, hay tanto que ignora...y por culpa de esa
ignorancia los condeno a ustedes. Ya tuvieron la chance de retroceder-
El Drapion avanzo cortando el camino a los entrenadores. Los chicos del
Ralts sollozaron, pero en ese momento ocurrio lo inesperado.
-L-Lady, Confusion!!
- Grito el muchacho, el Ralts en sus brazos levanto su mirada y sus
ojos brillaron de un color celeste. Fue solo un momento, el Drapion sin
necesidad de atacar aparto a los chicos y su Pokemon cayo al piso, aun
muy herido como para seguir combatiendo.
-Una pena...- Dijo Siva con indiferencia -
Pero esto no es ni la mitad de lo que les espera con Neron...con
Akshara...su mejor chance ahora es traicionar al joven Gautier y
entregarlo a su padre. Incluso es lo mas misericordioso para el mismo.
- Sam rodo rapidamente por el piso y agarro a los chicos y a su Ralts
en brazos protegiendolos con su cuerpo antes que el Drapion se acerque.
El ruido de costillas rotas se escucho en todo el callejon. El Drapion
no retrocedio con eso, sino que nuevamente golpeo el piso con furia.
//Earthquake 40 + 40 // [dice]0[/dice]
//Confu// [dice]1[/dice]
-Si Julia aun vive, el joven Gautier es una valiosa moneda de cambio para su padre. Si la chica murio...el chico le es inutil.
- Concluyo Siva analizando la situacion en voz alta, hablaba como si
recitara un libro, casi como si estuviera escribiendo sus palabras en un
diario. - Julia y el joven Gautier muertos...pueden significar muchas mas vidas a salvo.